El Diario Nica

Managua celebra la Purísima con fervor, tradición y unidad familiar

Las familias de Managua celebraron con profundo fervor mariano la tradicional Purísima de la Concepción de María, una festividad que se remonta a 1857 y que, año con año, reafirma la identidad religiosa y cultural del pueblo nicaragüense.

Esta tradición, considerada una de las más emblemáticas del país, continúa fortaleciendo los lazos de solidaridad, fe y hermandad entre todas las generaciones.Desde temprano, los barrios de la capital se llenaron de altares adornados con flores, luces, mantos celestes y blancos, mientras miles de devotos se preparaban para cantarle a la Virgen María.

Las familias, como es costumbre, compartieron dulces, frutas y las tradicionales “gorras” con quienes visitaron sus hogares, manteniendo vivo el espíritu de unidad y gratitud que caracteriza a la celebración.

El sonido del tradicional grito “¿Quién causa tanta alegría? ¡La Concepción de María!” resonó en calles, andenes y hogares, acompañado de cantos marianos que han pasado de generación en generación. Esta expresión de fe no solo convoca a los creyentes, sino que también promueve el encuentro comunitario y el fortalecimiento de los valores de convivencia.

Entre las familias protagonistas destaca la familia Acevedo, quienes desde hace 27 años celebran esta tradición con alegría, entrega y profundo sentimiento religioso. Su hogar se ha convertido en un punto de encuentro para vecinos y visitantes, que año tras año esperan compartir con ellos este acto de devoción.

Para los Acevedo, mantener viva la Purísima es una forma de honrar a la Virgen y transmitir a sus hijos y nietos el valor de la fe y la gratitud.La Purísima en Managua demuestra, una vez más, que esta tradición mariana continúa siendo un símbolo de unión, esperanza y orgullo nacional, capaz de reunir a miles de familias en un mismo canto de amor y devoción.