El expresidente hondureño Manuel Zelaya criticó la presunta intervención del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, en las elecciones de Honduras.
A través de un mensaje publicado el martes en su cuenta de X, Zelaya acusó a Trump de intentar manipular los resultados electorales. Según el también coordinador del partido LIBRE, esta injerencia buscaría afectar la candidatura de Rixi Moncada y frenar el proyecto político de su organización.
Zelaya añadió que tanto el mandatario estadounidense como sectores del bipartidismo hondureño intentan “imponer un golpe electoral”, aunque aseguró que la situación actual refleja a Xiomara Castro como la figura con mayor respaldo, superando el 55% de apoyo debido dijo a su buen desempeño en el gobierno.
Zelaya afirmó que LIBRE postula a una candidata intachable, honesta, sensible y con firmeza, destacando que su campaña es profundamente democrática y basada en una propuesta económica orientada a liberar al pueblo y romper los privilegios de las élites.
Según el exmandatario, estas maniobras responden al intento de la oposición de evitar una derrota segura en las urnas, subestimando dijo la determinación del pueblo hondureño.

Calificó la presunta intervención como “burda, amenazante e infame” y acusó a Trump de haber favorecido al expresidente Juan Orlando Hernández, vinculado a casos de narcotráfico, con el objetivo de influir en el proceso electoral.
En su mensaje, Zelaya rechazó las presiones externas y recordó la histórica resistencia de Honduras frente a golpes de Estado, fraudes, asesinatos políticos y persecución. “Si sobrevivimos a la narcodictadura, ¿cree que nos va a doblar un tuit suyo?”, escribió, dirigiéndose directamente a Trump, quien había declarado su apoyo a Tito Asfura y condicionado ayuda financiera a su victoria.
El expresidente Zelaya afirmó: “Pueden llamarnos comunistas, socialistas o insurgentes, lo que quieran. Somos hondureños libres y luchamos por la autodeterminación y una patria digna, justa e independiente. Ni Washington ni la oligarquía deciden por nosotros”.
Zelaya cerró con un llamado a la unidad: “Los que luchamos por la libertad estamos de pie; somos patriotas y nadie se rinde”.
Hace un año ya había denunciado que Estados Unidos usa a Honduras como un “laboratorio de sus políticas injerencistas”, contexto que, según él, explica la actual intromisión en el proceso electoral.
Tras los comicios generales del 30 de noviembre, se denunciaron diversas irregularidades. La candidata Rixi Moncada había advertido sobre posibles fraudes, y Marlos Ochoa, consejero del CNE, confirmó que los resultados del sistema TREP “no guardan certeza ni consistencia” y denunció falta de acceso público a los resultados preliminares.
Honduras ha enfrentado en los últimos años elecciones marcadas por denuncias de fraude, intervenciones externas y disputas pos-electorales, convirtiendo cada proceso en un foco de tensión y vigilancia regional.