El Diario Nica

Tormenta Melissa podría escalar a Huracán

Melissa ha ganado fuerza y podría convertirse en un huracán

La tormenta tropical Melissa avanzaba lentamente el jueves sobre el mar Caribe, llevando consigo el riesgo de aludes e inundaciones potencialmente mortales en Jamaica y el sur de La Española, la isla que comparten República Dominicana y Haití.

La tormenta causó la caída de un enorme árbol que mató a un anciano en la ciudad costera de Marigot, en el sur de Haití, mientras que otras cinco personas resultaron heridas en inundaciones en el área central de Artibonite, según la Agencia de Protección Civil.

Puedes leer: Venezuela inicia ejercicios militares para defender la soberanía

El vórtice de la tormenta de lento movimiento se ubicaba a unos 245 kilómetros (150 millas) al sureste de Kingston, Jamaica, y a unos 430 kilómetros (270 millas) al suroeste de Puerto Príncipe, Haití. Tenía vientos máximos sostenidos de 75 km/h (45 mph) y se movía hacia el norte a 6 km/h (3 mph), informó el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos (NHC por sus iniciales en inglés), con sede en Miami.

“El sistema todavía se mueve muy lentamente”, dijo Michael Brennan, director del Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos. “Estamos muy preocupados por el potencial de varios días de vientos de larga duración, marejadas ciclónicas, lluvias intensas e impactos de inundaciones”.

“La población debe permanecer en sus casas por un tema de seguridad”

Se tiene previsto que Melissa permanezca sobre aguas abiertas esta semana, pero se acercará a Jamaica y al suroeste de Haití en los próximos días. Se prevé que se fortalezca para convertirse en huracán el sábado, posiblemente alcanzando la categoría 4 para el martes.

Existen posibilidades de que se presenten condiciones de huracán en el sur de Haití y en toda Jamaica a partir del viernes por la noche o el sábado.

“Las aguas muy cálidas y el movimiento lento de esta tormenta son una receta para el desastre”, destacó Alex DaSilva, experto principal en huracanes de AccuWeather. “La intensificación rápida en un huracán de categoría 5 no está fuera de cuestión”.

Barbara Campbell, quien trabaja en Kingston, la capital de Jamaica, dijo por teléfono que ha preparado su hogar y comprado alimentos y agua antes de la tormenta.

En Jamaica, las autoridades informaron que 881 refugios estarán disponibles según fuera necesario. Se ordenó el cierre de los tribunales y las escuelas debían cambiar a clases remotas. Por su parte, las cuadrillas colocaron 1,000 sacos de arena en la parte oriental de Kingston para prevenir inundaciones de un arroyo cercano.

El ministro de Salud, Christopher Tufton, advirtió que los 325 centros de salud de Jamaica cerrarían el jueves por la tarde, y que la tormenta podría interrumpir las cadenas de suministro, incluidas las de medicamentos vitales.

Añadió que todos los hospitales están en modo de emergencia y tienen generadores capaces de proporcionar energía por hasta 72 horas.

El gobierno de Jamaica anunció cortes de energía inminentes y señaló que ya ha incorporado a docenas de trabajadores para ayudar en las secuelas de la tormenta.

Los meteorólogos indicaron que la región oriental de Jamaica podría recibir hasta 36 centímetros (14 pulgadas) de lluvia capaces de provocar inundaciones y deslizamientos de tierra dado que el suelo ya está saturado por lluvias intensas recientes no relacionadas con la tormenta.

“El sistema todavía está evolucionando”, dijo Rohan Brown, del Servicio Meteorológico de Jamaica. “Instamos a todos a estar atentos”.

Más de 100 personas permanecen en refugios en la República Dominicana, donde las escuelas, negocios y agencias gubernamentales cerraron en las nueve provincias bajo alerta. Decenas de sistemas de suministro de agua estaban fuera de servicio el jueves, afectando a más de medio millón de clientes. La tormenta también derribó árboles y semáforos y desató un par de pequeños deslizamientos de tierra.

Se esperaban hasta 36 centímetros (14 pulgadas) de lluvia también para el sur de Haití y el sur de la República Dominicana hasta el domingo, con la posibilidad de una mayor cantidad en algunas áreas.

El Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos en Miami advirtió que se esperan “inundaciones repentinas significativas y potencialmente mortales y numerosos deslizamientos de tierra” en Jamaica y el sur de La Española.

Había una preocupación adicional sobre el impacto de la tormenta en Haití, que ha sido devastado por tormentas pasadas debido a la erosión generalizada. La violencia de las pandillas, la pobreza y la gobernanza ineficaz causan que los preparativos para la tormenta sean limitados.

La Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de la ONU (OCHA, por sus siglas en inglés) anunció el jueves que se destinaron 4 millones de dólares para ayudar a más de 10,000 personas vulnerables en Haití antes de la tormenta. El dinero se destinará a apoyo vital para evacuaciones, transferencias de efectivo, gestión de refugios de emergencia y kits de agua, saneamiento e higiene, detalló la agencia.

Las inundaciones son una gran preocupación ya que Haití reportó 139 casos sospechosos de cólera y cinco muertes en una sola semana a principios de este mes luego de casi tres meses sin casos. La enfermedad se propaga con mayor frecuencia al consumir agua contaminada.