El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, anunció la activación de los Órganos de Dirección para la Defensa Integral (ODDI) en los estados Mérida, Trujillo, Lara y Yaracuy, en el marco de la Operación Independencia 200.
A través de la red social Instagram, el mandatario señaló que estas cuatro entidades conforman un corredor vital que se extiende desde Los Andes hasta el Centro Occidente, calificándolo como una «línea clave de garantía de defensa, de estabilidad económica y desde todo punto de vista».
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El jefe de Estado subrayó que estas acciones garantizarán el cumplimiento de «27 tareas territoriales estado por estado, zona por zona, comunidad por comunidad», en defensa del derecho a la vida, la alegría y la máxima felicidad del pueblo. Asimismo enfatizó que el despliegue se ejecuta «en perfecta fusión popular, militar, policial para garantizar la seguridad en el territorio y hacer a la patria inexpugnable».
El mandatario venezolano convocó a la perfecta unión del pueblo y los distintos sectores en estos estados para «ganar la paz y ejercer la soberanía en el territorio nacional».

En la Zona Operativa de Defensa Integral (ZODI) N.º 13 del estado Lara, se ejecutó la activación de la desconcentración, el despliegue y el enmascaramiento de los medios, reafirmando el compromiso con la defensa integral del territorio para garantizar la paz. Por su parte, el gobernador de Yaracuy, Leonardo Intoci, señaló que el plan se activó de manera simultánea en los 14 municipios de la entidad. Intoci recalcó que «el pueblo yaracuyano atendió el llamado hecho por el jefe de Estado», participando activamente para fortalecer la defensa territorial.
Con esto Venezuela reforzó la vigilancia y protección de sus espacios fronterizos con Brasil y Colombia, así como de la fachada atlántica y el mar Caribe, mediante la activación de Zonas Operativas de Defensa Integral (ZODI) en 20 estados del país. El Ejecutivo bolivariano informó que esta medida responde a la presencia de medios de combate navales y aéreos de Estados Unidos en el mar Caribe, zona donde Washington ejecuta ataques contra embarcaciones.
Debido a estos actos, el Gobierno venezolano presentó una denuncia formal ante el Consejo de Seguridad y el secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), António Guterres. Caracas calificó las acciones como violaciones al Derecho Internacional y la Carta de la ONU, y las consideró como ejecuciones extrajudiciales.