En los mercados, ferias y calles de Nicaragua, hay un dulce que conquista paladares con su sencillez y sabor: los churritos dulces y pequeños. Este tradicional bocadito, crujiente por fuera y suave por dentro, es una delicia que forma parte del repertorio popular de la repostería nicaragüense.
Los churritos nicas son elaborados con una masa a base de harina de maíz, agua, sal y un toque de limón. Se fríen hasta obtener una textura dorada y crujiente, y luego se bañan en miel de rapadura o se espolvorean con azúcar y canela, lo que les da ese sabor dulce y característico.
Estos dulces son comunes en celebraciones patronales, ferias gastronómicas y como merienda en los hogares. Su tamaño pequeño los hace perfectos para compartir, y su sabor evoca recuerdos de infancia, tardes en familia y tradiciones que se mantienen vivas generación tras generación.
Los churritos dulces se pueden encontrar en puestos ambulantes, mercados locales y panaderías tradicionales. En ciudades como León, Granada y Managua, es fácil ver vendedores ofreciendo bolsitas de churritos recién hechos, especialmente en épocas festivas. La receta es sencilla y accesible. Solo necesitas harina de maíz, agua, sal, aceite para freír y miel o azúcar para el toque final. Algunos cocineros le agregan canela o esencia de vainilla para intensificar el sabor