Con el objetivo de identificar de manera temprana la diabetes en niños, adolescentes y jóvenes, el Ministerio de Salud (MINSA) de Nicaragua dio inicio este martes a la Campaña Nacional “Sin Diabetes”, una ambiciosa estrategia sanitaria que busca examinar a 2.5 millones de menores de hasta 20 años en todo el territorio nacional.
La campaña, que comenzó oficialmente el 1 de octubre, contempla la realización de pruebas de glicemia en barrios, comunidades, escuelas, centros técnicos, universidades y centros de trabajo. Esta iniciativa forma parte del compromiso del MINSA, por frenar el aumento de la diabetes tipo 2 en la población infantil y juvenil, un fenómeno en crecimiento debido al sedentarismo y la obesidad, según estudios recientes del sector salud y académicos como la tesis “Diabetes Mellitus” (UNAN, 2016).
El programa tiene tres pilares fundamentales:
- Diagnóstico oportuno: Detectar la diabetes desde las etapas más tempranas, incluso en recién nacidos.
- Prevención de complicaciones: Brindar tratamiento adecuado y seguimiento médico temprano para evitar secuelas graves de la enfermedad.
- Educación y promoción de hábitos saludables: Desarrollar actividades formativas para fomentar una alimentación balanceada y la práctica regular de ejercicio.
La detección se lleva a cabo mediante pruebas de glicemia capilar, que permiten conocer los niveles de glucosa en sangre. Estas pruebas estarán disponibles en puestos de muestreo instalados en puntos estratégicos para garantizar una cobertura amplia y accesible.

La diabetes tipo 2, tradicionalmente considerada una enfermedad de adultos, ha ido en aumento en niños y adolescentes, especialmente en zonas urbanas, donde los estilos de vida sedentarios y los malos hábitos alimenticios son cada vez más frecuentes. La detección temprana no solo mejora la calidad de vida de los pacientes, sino que también reduce la carga económica para el sistema de salud público.
Con esta campaña, Nicaragua da un paso firme hacia el control de una enfermedad silenciosa, que de no tratarse a tiempo, puede provocar complicaciones como insuficiencia renal, problemas cardiovasculares, ceguera o amputaciones.