Realizada por: César Mairena
El domingo, 21 de septiembre del presente año, se celebró un “homenaje” por la memoria del promotor conservador asesinado, Charlie Kirk, donde Donald Trump expresó que la víctima era el “mayor evangelista de la libertad estadounidense” y un “mártir”.
La actividad político-religiosa, se celebró en Arizona, de donde es originaria su viuda. El activista conservador, fue asesinado en una universidad del estado de Utah, el 10 de septiembre del presente año.
También Trump expresó, sobre Kirk: “Fue asesinado porque vivía con valentía, vivía con audacia y argumentaba con brillantez”.
Mientras su viuda, Erika Kirk, expresó que perdonaba públicamente a Tyler Robinson, el presunto asesino de su esposo, que enfrentará un juicio que puede terminar con una condena a la pena de muerte. La viuda de Kirk, también expresó: “Lo perdono porque es lo que hizo Cristo”.
El Movimiento Político, que Donald Trump ha impulsado se hizo presente, con mucho del público asistente, portando las características gorras de MAGA (Make America Great Again) y capitalizando el hecho de que el homenajeado practicaba el cristianismo protestante. Hubo momentos de oración y alabanzas, a lo largo de toda la actividad, pues se celebró un servicio religioso.
Desde la época de las Cruzadas europeas a la denominada Tierra Santa donde murió Jesús El Cristo, para liberarla de los “infieles árabes”, la historia ha demostrado que cuando se usa la religión para lograr fines políticos, se da rienda suelta al fanatismo y la radicalización, únicamente dejando muerte y destrucción, en nombre de Dios.
Y el gobierno de Donald Trump, está radicalizado, amenazando con reprimir a activistas y organizaciones de izquierda, aunque no promuevan la violencia política, ni tengan conexión alguna con el asesino de Kirk.
Reflejo de esta radicalización, Pete Hegseth, el secretario de Defensa de EEUU, declaró en esta actividad: “Pero este momento es el punto de inflexión para Estados Unidos, Charlie, nosotros nos encargamos a partir de aquí. Que Dios te bendiga”.
Otra prueba de la radicalización del gobierno Trump, producto del asesinato de Charlie Kirk, es que maestros, funcionarios públicos y hasta el famoso presentador de televisión, Jimmy Kimmel, han sido despedidos o penalizados por comentarios criticando al promotor juvenil conservador.
¿Pero el de Charlie Kirk fue el primer asesinato por razones políticas en EEUU? Pues no, hay tres magnicidios de figuras muy conocidas en EEUU, que demuestran que la violencia política ha sido utilizada producto de la radicalización y la intolerancia en ese país.
Casualmente, en este año, el presidente Trump, desclasificó documentos vinculados a este magnicidio, no se sabe aún, a ciencia cierta, quien fue el autor intelectual de este asesinato de uno de los presidentes más populares de la historia norteamericana.
En el caso de Malcom X, ministro musulmán afroamericano y activista de derechos humanos, fue asesinado un 21 de febrero de 1965 (tres años antes que King y menos de dos años de la muerte del presidente Kennedy)
Mientras que el asesinato de Martin Luther King, sucedió a las 06:05 pm, un jueves 4 de abril de 1968 y fue asesinado por el disparo de un francotirador en la cabeza, mientras se encontraba en un balcón afuera de su habitación en el segundo piso del Motel Lorraine en Memphis, Tennessee.
Estos tres asesinatos políticos, sucedidos en la década de los años 60´s, del siglo 20, tienen un elemento en común: Sus autores intelectuales se desconocen.
Tanto la legisladora demócrata, Melissa Hortman como su esposo, fueron encontrados muertos en la localidad de Brooklyn Park.
El sospechoso (que las autoridades todavía buscan porque sigue prófugo de la justicia) es Vance Luther Boelter, un hombre blanco de 57 años, quien se hizo pasar por agente policial. Este hombre no solo asesinó a Hortman y su esposo, también hirió a John A. Hoffman (senador estatal de Minnesota y del partido Demócrata) y a su esposa, en otro atentado a tiros, en la localidad de Champlin.
Obama, en un evento en Pensilvania, se refirió a las “serias diferencias” y “profundas divisiones” que aquejan a EEUU como la razón por la que cree que el país se encuentra en un momento crítico.
“Creo que, en momentos como este, cuando las tensiones son altas, parte del trabajo del presidente es unir a la gente”, declaró Obama en una clara crítica al actual presidente Trump, que se ha expresado muy violentamente contra sus adversarios políticos y opositores.
“Y así, cuando escucho no solo a nuestro actual presidente, sino a sus ayudantes, que tienen un historial de llamar a los oponentes políticos “alimañas”, enemigos que necesitan ser “atacados”, eso habla de un problema más amplio que tenemos en este momento y algo con lo que vamos a tener que lidiar, todos nosotros”, dijo Obama.
Osea, Barack Obama, teme a la radicalización de los ultra conservadores y ultra derecha racista y xenófoba que odia a los migrantes, -con la excusa del asesinato político de Kirk- del gabinete de Donald Trump, que como ya hemos visto, en anteriores artículos de análisis, tiene un cuestionable pasado con un familiar vinculado al racista KKK.
Estas milicias supremacistas blancas, son el brazo armado de organizaciones de odio, terroristas y racistas como el Ku Klux Klan (KKK), que fue fundado inmediatamente después de la guerra civil de EEUU.
El KKK, ha bajado de perfil, pero aún existe sobre todo en zonas rurales de estados sureños del país, y es uno de los principales enemigos de organizaciones gubernamentales como el FBI, que enfrenta amenazas externas e internas -como de este caso- contra el Estado y el Gobierno de los EEUU.
Muchos especialistas consideran que esta agrupación es la heredera directa de las Panteras Negras, surgida en la década de los 60`s del siglo 20, para defender los derechos de los afrodescendientes en EEUU, pero que están mejor organizados, entrenados y armados. Jhon Fitzgerald Jhonson, líder de la coalición, se confiesa estudioso de la obra de Malcom X. Tienen presencia y miembros activos, en tres estados sureños de la unión: Kentucky, Georgia y Louisiana.
Aunque son más pequeños que las milicias supremacistas blancas y tienen menos tiempo de haber sido fundadas, esta Coalición es un esfuerzo serio, de auto defensa, que no tiene precedentes, de parte de los afrodescendientes norteamericanos, para defenderse de atropellos tanto de autoridades nacionales como de racistas.
Consideraciones finales sobre el contexto actual de este tema, que podrían llevar a una guerra civil por razones políticas, religiosas y raciales en EEUU:
- Así como en Europa, la política negligente de los actuales gobernantes, ha generado el resurgimiento de agrupaciones, partidos e ideologías, de ultra derecha, racistas, xenófobas y nacionalistas que canalizan y aprovechan el descontento popular, Trump -con el asesinato de Charlie Kirk, valorándolo como mártir de su causa- ha sabido capitalizar la situación, para justificar la radicalización no solo de su gobierno, sino también de milicias supremacistas blancas fuertemente armadas.
- La manipulación religiosa, por motivos políticos (como vimos en el acto celebrado por Trump, junto con la viuda de Kirk en Arizona) es una mezcla en extremo peligrosa y explosiva, pues las personas que son objeto de la manipulación, no razonan al ser manipuladas emocionalmente, apelando a principios como el nacionalismo, el derecho divino y que ellos son los elegidos de Dios, más que sus adversarios, lo que constituye un peligroso caldo de cultivo para el fanatismo y la radicalización de los individuos.
- Instituciones como el FBI, que actualmente ha sido instrumentalizado por Trump, para perseguir a sus adversarios políticos -en lugar de perseguir el crimen- y de limpiar el prestigio del actual presidente (por ejemplo en el caso Epstein), está más debilitado que nunca como una institución, que de acuerdo a su ordenamiento jurídico, debería enfrentar a supremacistas blancos fuertemente armados en el país que ya radicalizados, podrían ejecutar levantamientos armados contra el gobierno federal de EEUU.
- Por primera vez en la historia de EEUU, surge una organización de afrodescendientes (como la coalición NFAC) que se arma y está organizada para responder a los ataques y agresiones de racistas miembros de milicias supremacistas blancas y de abusos policiales, es un elemento que también puede facilitar una guerra civil o un conflicto interno en EEUU, por razones raciales, religiosas y políticas.
- Las condiciones sociales, políticas, económicas, religiosas, están dadas para que en EEUU estalle una guerra civil, donde el fanatismo y la radicalización, desenfrenados, se manifiesten de manera armada entre bandos de “izquierda” y “derecha”, blancos contra negros y cristianos protestantes contra otras religiones en el país, haciendo justificable el enfrentamiento para “hacer de nuevo grande a América”.
- El temor del expresidente Barack Obama, está más que justificado con un presidente como Donald Trump, que en lugar de conciliar y unir al país, ante problemáticas económicas, tecnológicas, o geopolíticas foráneas, está poniendo leña al fuego, sin saber los alcances de la fogata a lo interno del país.
- Donald Trump, está ejecutando el manual del Golpe Blando, de Gene Sharp, en contra de sus opositores a lo interno del país, por ser un político radicalizado y un comprobado racista, manipulando a sus seguidores emocionalmente, impidiendo el razonamiento objetivo y concreto, característica propia de las guerras de 5ta generación.
- Trump está actuando como un Guasón, donde lo único que le interesa es el caos, destruyendo la estabilidad y alternabilidad en la presidencia, que tanto los Demócratas como los Republicanos, han establecido desde que EEUU fue fundado, por eso le interesaría un conflicto armado interno, para acabar con el Estado Profundo que, desde su primera administración, ha enfrentado.