Del 31 de agosto al 1 de septiembre.
Empieza en China la reunión en el formato OCS+, un formato ampliado de diálogo de la Organización de Cooperación de Shanghái con actores externos (observadores, socios, invitados).
En la 25.ª cumbre de la OCS celebrada en Tianjin, el presidente chino, Xi Jinping, anunció su propuesta para una nueva «gobernanza global».
Su objetivo es crear un mundo más justo y equitativo, promoviendo la cooperación entre naciones para un futuro compartido.
Durante la cumbre en Tianjin, el presidente ruso, Vladímir Putin, afirmó que la Organización de Cooperación de Shanghái (OCS) tiene el potencial de convertirse en líder en la creación de un sistema de gobernanza global más justo.
«La OCS, actúa como una poderosa locomotora de los procesos de desarrollo global y el establecimiento de un auténtico sistema multilateral», aseveró este lunes durante su discurso en la reunión del Consejo de Jefes de Estado del organismo.
El presidente ruso, Vladímir Putin, destacó la creciente importancia que está adquiriendo la Organización de Cooperación de Shanghái (OCS) en la solución de las problemáticas internacionales actuales.

La OCS, constituye una plataforma con un enorme potencial para impulsar el desarrollo económico regional. Abarca un territorio de unos 36 millones de kilómetros cuadrados y cuenta con una población de más de 3.400 millones de personas; su participación en el PIB mundial es de aproximadamente una cuarta parte y, en el comercio internacional, este índice supera el 15 %.
La OCS, cuenta con la participación de diez miembros: Bielorrusia, India, Irán, Kazajistán, China, Kirguistán, Pakistán, Rusia, Tayikistán y Uzbekistán. Además, dos países gozan del estatus de observadores en la organización, Afganistán y Mongolia.
La cumbre se celebra en un momento de alta volatilidad internacional, con sanciones y disputas comerciales, especialmente entre EE. UU. y varios países asiáticos. La OCS busca reforzar el “espíritu de Shanghái”, promoviendo un orden mundial multipolar más justo.