El hallazgo, anunciado por la Alcaldía de Managua, impulsa la construcción de un museo moderno con tecnología de punta para preservar y difundir un legado de más de 6,000 años.
Durante las obras del nuevo museo en el histórico sitio de Acahualinca, arqueólogos y autoridades de Managua descubrieron huellas humanas que amplían el patrimonio cultural de Nicaragua y reavivan el debate sobre su verdadero origen.
Las arenas milenarias de Acahualinca volvieron a hablar. La Alcaldía de Managua, anunció el descubrimiento de nuevas huellas humanas, halladas durante la construcción de un museo que integrará tecnología avanzada para narrar la historia de este patrimonio arqueológico.

María Teresa Obregón Téllez, coordinadora de programas culturales de la Alcaldía, reveló que el proyecto permitirá a visitantes y estudiantes conocer detalles inéditos de cómo eran los pies de los ancestros hace más de 6,000 años.
“Hemos encontrado más huellas, y desde el área de Patrimonio y Cultura estamos trabajando en la construcción de este museo, que contará con tecnología de punta y estará abierto a estudiantes de primaria, secundaria, universidad y turistas”, afirmó Obregón.
Las huellas, agregó, son “testimonio ferviente y fehaciente de la vida humana que los nicaragüenses tenemos el privilegio de conservar”.

El anuncio se realizó durante un coloquio académico en colaboración con la Universidad American College y la Academia Nacional de Historia y Geografía de Nicaragua. Allí, el doctor Eduardo Arellano, secretario de la Academia, profundizó en fenómenos arqueológicos de la zona y recordó que las huellas fueron descubiertas accidentalmente en 1874, mientras se extraían piedras canteras.
En un repaso histórico, Arellano indicó que un especialista estadounidense estimó en su momento que podrían tener hasta 50,000 años de antigüedad, aunque posteriores investigaciones, como las realizadas entre 1940 y 1942, descartaron la hipótesis de que las personas estuvieran huyendo de una erupción volcánica.
“Se han encontrado huellas en todas las direcciones, no solo hacia un volcán”, precisó el investigador.
El arqueólogo Edgard Espinoza, de la Dirección de Patrimonio Histórico de la Alcaldía, destacó el valor de estos encuentros para que las nuevas generaciones comprendan la importancia del legado cultural.
Por su parte, Wilfredo Navarro Moreira, presidente de la Academia, subrayó la alianza institucional para promover la historia nacional.
“Nuestro gobierno está comprometido con el conocimiento de nuestra historia y cultura, promoviendo el legado de más de 6,000 años que fortalece nuestra identidad”, concluyó.
El nuevo hallazgo no solo amplía el registro arqueológico de Acahualinca, sino que refuerza su papel como mito fundacional de la identidad nicaragüense, uniendo ciencia, memoria y orgullo nacional bajo la promesa de un museo que conectará el pasado con el futuro.