Jennifer López demostró una vez más por qué sigue siendo una de las artistas más influyentes del pop mundial. La cantante y actriz estadounidense ofreció un vibrante concierto este domingo en la Movistar Arena de Madrid, como parte de su gira internacional, ante más de 15 mil asistentes que corearon cada uno de sus éxitos.
La presentación en la capital española se sumó a las fechas ya cumplidas en Pontevedra, Cádiz y Fuengirola. Aunque el espectáculo comenzó con un retraso de aproximadamente 25 minutos, la espera fue recompensada con una entrada espectacular: López apareció en escena con un llamativo atuendo de lentejuelas plateadas, botas altas y una chaqueta dorada con flecos.
Desde el primer momento, Jennifer estableció una conexión cercana con su audiencia, alternando el español y el inglés para saludar y agradecer el cariño del público. A punto de cumplir 56 años, la artista mostró una vitalidad impresionante en escena, acompañada de potentes coreografías; un equipo de bailarines y un espectáculo visual de primer nivel.
El repertorio incluyó clásicos como “On the Floor”, “Let’s Get Loud”, “Waiting For Tonight” y “Ain’t Your Mama”, entre otros. Cada interpretación estuvo acompañada de efectos visuales, pirotecnia y múltiples cambios de vestuario. Uno de los momentos más emotivos de la noche fue la interpretación de “Gracias a la Vida”, que Jennifer dedicó como un homenaje a la cultura española. Vestida con un traje flamenco rojo, rindió tributo al folclore ibérico desde un escenario convertido en tablao.
La gira continuará este martes en Barcelona, seguida de presentaciones en Bilbao el 16 de julio y Tenerife el 18, antes de visitar otros países europeos y del Medio Oriente.