El Diario Nica

Alcaraz firma su quinta final

La organización de Roland Garros sueña con las finales ideales en sus cuadros individuales: Aryna Sabalenka (1) frente a Coco Gauff (2) en femenino, y Jannik Sinner (1) contra Carlos Alcaraz (2) en masculino.

Alcaraz, criado en arcilla, se impuso en semifinales ante Lorenzo Musetti con parciales de 4-6, 7-6(3), 6-0, 2-0, antes de que el italiano se retirara por lesión. Musetti había alcanzado al menos las semifinales en Montecarlo, Madrid y Roma, pero en París volvió a quedarse corto. El salto entre ser semifinalista y campeón aún se le resiste.

El pupilo de Juan Carlos Ferrero y Samuel López vivió un punto de inflexión en Roland Garros el año pasado. Desde entonces, acumula un impresionante registro en tierra batida: 33 victorias y solo 2 derrotas (la final olímpica ante Novak Djokovic y la del Godó ante Holger Rune).

Alcaraz lidera la temporada en todos los frentes: más títulos (3), más victorias totales (36) y más triunfos en tierra (21). Su dominio volvió a notarse ante Musetti, quien terminó cediendo física y mentalmente ante el poderío del español.

“Nunca es agradable ganar un partido de esta manera”. Carlos Alcaraz

El italiano, tras salvar dos bolas de quiebre, tomó ventaja 5-4 en el primer set. Alcaraz debía sacar para mantenerse en el parcial, pero Musetti lo puso contra las cuerdas con un 15-40. La presión hizo efecto y un error de derecha del murciano, su tiro se fue por la línea de dobles, le entregó el set al italiano.

El nivel mostrado por Musetti recordaba al de la primera manga de la final de Montecarlo. Pero en un duelo al mejor de cinco, aún quedaba mucho camino por recorrer. La reacción de Alcaraz fue inmediata: logró un ‘break’ en blanco, sellado con una dejada, en el tercer juego del segundo set.

La semifinal se jugaba bajo techo y con luz artificial debido a la constante amenaza de lluvia en París. A diferencia de otras ocasiones, Musetti no bajó los brazos ante la adversidad e igualó el marcador 2-2.

Alcaraz no logró aprovechar dos oportunidades para colocarse 5-4, y las estadísticas mostraban un 1 de 5 en puntos de quiebre.

El guion del primer set volvía a repetirse: Carlitos sacando para seguir con vida. Esta vez lo consiguió y hasta se puso 6-5 con su servicio. Pero Musetti respondió con un revés milimétrico que forzó el tiebreak. Fue ahí donde comenzó la remontada del español, impulsado por un espíritu combativo digno de Rafael Nadal.

El campeón de cuatro Grand Slams tomó el control desde la devolución, y su tercera rotura le dio ventaja en la tercera manga. Mientras él subía el nivel, su rival caía en lo físico y anímico. El set fue un monólogo, un 6-0 contundente, el decimoctavo «rosco» de su carrera y el segundo consecutivo tras el logrado ante Tommy Paul.

Musetti, visiblemente agotado, pidió la asistencia del fisioterapeuta, quien le aplicó un masaje en el muslo izquierdo. Desde la televisión, Jannik Sinner —programado para disputar la segunda semifinal ante Novak Djokovic a las 19:00 horas, seguía atento lo que ocurría en pista.

Finalmente, Musetti no pudo continuar tras encadenar ocho juegos perdidos y optó por retirarse, poniendo fin al duelo.

Semifinalista en la última edición de Wimbledon y en los Juegos Olímpicos de París, a Musetti aún le falta dar el salto definitivo frente a los grandes nombres del circuito. Italia soñaba con una histórica final totalmente italiana, pero ese deseo deberá esperar.

Con 22 años y 34 días, Carlos Alcaraz se convierte en el quinto jugador más joven de la Era Open en alcanzar cinco finales de Grand Slam. Las cuatro anteriores las ganó, y suele recordarlo con una frase clara: “Las finales están para ganarlas.”
Las 2 horas y 25 minutos que duró el partido fueron el ensayo perfecto de cara a la gran final del domingo.