La esperada versión en acción real de Blanca Nieves, uno de los grandes proyectos de Disney para 2025, debutará en plataformas digitales el próximo 13 de mayo, tras no cumplir las expectativas en taquilla. La cinta, protagonizada por Rachel Zegler y Gal Gadot, recaudó 200 millones de dólares a nivel mundial, cifra insuficiente para cubrir su millonario presupuesto, estimado entre 240 y 270 millones.
A pesar del revuelo mediático y la nostalgia que suele acompañar a los remakes de Disney, esta producción no logró replicar el éxito de títulos como El Rey León o Aladdin. En su primer fin de semana, recaudó apenas 87 millones a nivel global, con solo 43 millones en EE.UU., quedando rezagada frente a otros “live-action” del estudio. El fracaso ha reavivado el debate sobre el agotamiento del formato y la desconexión entre Disney y las nuevas audiencias.
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La película enfrentó críticas desde su anuncio, especialmente por la elección de Zegler como una Blanca Nieves empoderada, sin el clásico enfoque romántico. Sus declaraciones, defendiendo una versión más moderna del personaje, generaron reacciones encontradas en redes sociales. Otro punto controversial fue la eliminación de los siete enanos, reemplazados por un grupo diverso de figuras mágicas, lo que dividió a los fanáticos del cuento clásico. Además, la promoción del filme se vio marcada por supuestas tensiones entre Zegler y Gadot, captadas en videos virales que alimentaron rumores de rivalidades. Con todos estos factores en juego, Blanca Nieves no logró encantar en la gran pantalla. Ahora, su lanzamiento digital podría marcar un nuevo capítulo en la recepción del filme… o confirmar su caída como uno de los tropiezos más sonados de Disney.