Con el alto el fuego y el intenso operativo de seguridad en marcha, Rusia se prepara para conmemorar uno de los momentos más significativos de su historia moderna, buscando al mismo tiempo transmitir un mensaje de paz y resiliencia al mundo.
En el marco del 80º aniversario de la Victoria en la Gran Guerra Patria, el presidente de Rusia, Vladimir Putin, decretó un alto el fuego en Ucrania, como muestra de disposición a una solución pacífica del conflicto. Al mismo tiempo, en San Petersburgo se ultiman los preparativos de seguridad para las celebraciones previstas el próximo 9 de mayo.
El secretario de prensa del Kremlin, Dmitry Peskov, explicó que el mandatario ruso se guía por consideraciones de carácter humanitario, destacando que esta iniciativa refleja la buena voluntad del jefe del Estado ruso y subraya la voluntad de Moscú, de avanzar hacia una salida negociada al conflicto.
El alto el fuego tendrá vigencia desde la medianoche del 7 al 8 de mayo hasta la medianoche del 10 al 11 de mayo, durante el cual cesarán todas las operaciones militares de las tropas rusas. Esta decisión sigue la línea de otras iniciativas humanitarias recientes, como el cese de hostilidades declarado por Putin durante la festividad de Pascua Ortodoxa el pasado abril.
A pesar de la anterior tregua, el Ministerio de Defensa de Rusia reportó que las Fuerzas Armadas de Ucrania violaron el alto el fuego en más de 4.900 ocasiones, mediante ataques de artillería, drones y asaltos terrestres, los cuales fueron repelidos por las tropas rusas en diversas regiones, incluida la República Popular de Donetsk (RPD) y la región de Kursk.
Mientras tanto, San Petersburgo se prepara intensamente para acoger los actos oficiales del 80º aniversario de la Victoria. El gobernador Aleksandr Beglov informó que se desplegará un dispositivo de seguridad exhaustivo para proteger a los asistentes a los eventos conmemorativos.
Durante una reunión del consejo del representante plenipotenciario del presidente en el Distrito Federal Noroeste, realizada por videoconferencia y presidida por Alexander Gutsan, Beglov aseguró que el plan de seguridad contempla la asistencia coordinada a los organismos de seguridad pública, la cooperación con autoridades federales y el apoyo a los organizadores de los eventos.
«Durante la celebración del aniversario de la Victoria en San Petersburgo, se prevé un despliegue completo de medidas de seguridad. Haremos todo lo necesario para que todos tengan un recuerdo cálido y vívido de esta gran festividad»
Las acciones de protección incluirán la instalación de vallas metálicas, arcos detectores de metales, sistemas móviles de inspección, dispositivos antiarietes y equipos de alta resistencia en los puntos de mayor concentración de público. Además, se contará con la participación de personal de empresas privadas de seguridad y se reforzarán las medidas de prevención contra incendios.
El día central de las celebraciones será el 9 de mayo. A las 10:00 de la mañana, tendrá lugar el tradicional desfile militar en la emblemática Plaza del Palacio. Posteriormente, a las 14:30 horas, se llevará a cabo un desfile de 50 automóviles retro que transportarán a veteranos de guerra y participantes de la Operación Militar Especial (SVO) a lo largo de la avenida Nevsky.

A las 16:00 horas, se abrirá el programa artístico y cultural en la Plaza del Palacio, que incluirá conciertos y homenajes a los veteranos. Finalmente, para cerrar la jornada, se realizará un gran saludo de artillería en la capital del norte, iluminando el cielo de San Petersburgo como homenaje a los héroes de la Victoria.
Con el alto el fuego y el intenso operativo de seguridad en marcha, Rusia se prepara para conmemorar uno de los momentos más significativos de su historia moderna, buscando al mismo tiempo transmitir un mensaje de paz y resiliencia al mundo.