El Ministerio del Ambiente y de los Recursos Naturales (MARENA) ha confirmado que desde la madrugada del 1 de enero de 2025 comenzó la tercera arribada masiva de tortugas marinas de la especie Paslama en la playa del Refugio de Vida Silvestre La Flor, ubicada en el municipio de San Juan del Sur, departamento de Rivas. Durante este fenómeno natural, se han contabilizado un total de 3,495 hembras anidantes que han depositado sus huevos en este vital espacio para la conservación de la biodiversidad marina.
Las arribadas masivas de tortugas son uno de los eventos más impresionantes de la naturaleza. Este proceso ocurre entre los meses de julio y enero, y tiene una duración aproximada de seis días. Durante este tiempo, las tortugas marinas recorren miles de kilómetros en el océano, siguiendo una trayectoria que las lleva a la playa que las vio nacer, para depositar sus huevos en un acto que ha sido interpretado como una esperanza para la conservación de la especie.
Cada año, la playa La Flor se convierte en un refugio natural donde las tortugas marinas de la especie Paslama regresan para asegurar la continuidad de su ciclo reproductivo. Este fenómeno es un claro ejemplo de la resiliencia de la naturaleza, que, a pesar de las amenazas ambientales y la actividad humana, sigue mostrando signos de esperanza a través de la llegada masiva de estas tortugas.
El equipo de MARENA, en conjunto con voluntarios y expertos en conservación, realiza una minuciosa labor de monitoreo y protección de los nidos y huevos depositados por las tortugas. Este esfuerzo busca garantizar la protección de la especie y prevenir el impacto de actividades ilegales o depredadores naturales que puedan afectar el éxito de la anidación.
El refugio de vida silvestre La Flor ha sido clave para el éxito de esta labor, convirtiéndose en uno de los puntos más importantes para la preservación de las tortugas marinas en Nicaragua. MARENA destaca que, en los últimos años, la población de tortugas ha mostrado señales positivas de recuperación, gracias a la implementación de estrategias de protección, así como al trabajo conjunto con comunidades locales.
Este tipo de arribadas masivas es un recordatorio de la importancia de seguir promoviendo políticas públicas que apoyen la conservación de especies vulnerables y que fomenten el respeto por nuestros ecosistemas marinos.
La tercera arribada masiva de tortugas marinas de la especie Paslama es, sin duda, un motivo de celebración para la conservación ambiental en Nicaragua, pero también un llamado a continuar trabajando por la protección de nuestros recursos naturales para las futuras generaciones.