El Presidente de la República de Nicaragua, Comandante Daniel Ortega Saavedra, calificó la XVII Cumbre Empresarial China-América Latina y el Caribe (China-LAC) como un «hecho histórico y extraordinario», destacando su potencial para fomentar la paz, el amor y el desarrollo económico de los pueblos de la región. El evento, titulado «Uniendo fuerzas, creando oportunidades: Nuevos horizontes para China y América Latina y el Caribe», se lleva a cabo con la participación de destacados líderes empresariales, políticos y autoridades de ambos continentes.
Durante su intervención, Daniel Ortega expresó su profundo agradecimiento al Presidente de la República Popular China, Xi Jinping, por haber seleccionado Nicaragua como sede de este importante encuentro. El mandatario nicaragüense destacó el gesto de China como un acto de solidaridad y cooperación internacional que refuerza los lazos entre ambos continentes, creando nuevas oportunidades de desarrollo.
«Es un gesto extraordinario lo que hace el Presidente Xi Jinping, al cual saludamos y agradecemos por haber pensado en Nicaragua para que aquí se realice este evento histórico. Es un evento para la paz, para el amor, para que se puedan multiplicar más desde los más pequeños negocios hasta los más grandes, porque eso le va a traer beneficios a nuestros pueblos,» expresó Ortega, subrayando el impacto positivo de la cumbre no solo para Nicaragua, sino para toda América Latina y el Caribe.
La cumbre empresarial, que reúne a más de 200 empresarios y representantes de instituciones gubernamentales de ambos lados del Pacífico, tiene como objetivo promover el comercio, la inversión y la cooperación entre China y América Latina. Se espera que el evento contribuya al fortalecimiento de las relaciones económicas y comerciales, impulsando el crecimiento de los sectores productivos, desde las pequeñas y medianas empresas hasta grandes corporaciones.
El mandatario nicaragüense también enfatizó la importancia de la unidad regional, señalando que el fortalecimiento de los lazos con China es una vía para diversificar las relaciones económicas y enfrentar de manera conjunta los retos del futuro. La presencia de China, que se ha consolidado como un socio estratégico en diversas áreas, es vista por Ortega como un paso hacia una mayor integración de la región latinoamericana y caribeña en la economía global.
La cumbre se desarrolla en un contexto de creciente colaboración entre China y América Latina, una relación que ha permitido a los países de la región acceder a nuevas fuentes de financiamiento, infraestructura y tecnología. Con la organización de este evento, Nicaragua se posiciona como un puente clave en la relación entre el gigante asiático y los países de la región, reafirmando su rol como actor principal en el ámbito internacional.
Al concluir su intervención, Ortega renovó su compromiso con el fortalecimiento de la paz, el desarrollo económico y la cooperación internacional, convencido de que eventos como la XVII Cumbre Empresarial China-LAC son fundamentales para abrir nuevos horizontes para el futuro de la región.
Este evento representa no solo una oportunidad para el fortalecimiento de las relaciones comerciales y diplomáticas, sino también una clara muestra del compromiso de Nicaragua y de América Latina en su conjunto con la cooperación global en beneficio de todos sus pueblos.