Ecuador, en una severa crisis eléctrica que ha obligado a anunciar apagones de 14 horas.
El Gobierno de Ecuador partió de Colombia con un sabor amargo tras no concretar la compra de energía al país vecino.
Se esperaba que en la reunión bilateral entre el presidente anfitrión, Gustavo Petro, y su par ecuatoriano, Daniel Noboa, en el contexto de la COP16, en Cali (Valle del Cauca)— ambos lograran un acuerdo para retomar la venta de energía de Colombia a Ecuador, suspendida a principios de octubre de este año.
El balance del encuentro entre ambos mandatarios, lo hizo el canciller colombiano, Luis Gilberto Murillo, quien dijo que fue «bastante productivo», a pesar del revés para Ecuador. Sin embargo, fue la ministra de Energía ecuatoriana, Inés Manzano, quien aclaró que el gobierno colombiano no les vendería energía.
El cara a cara entre ambos mandatarios, había generado expectativa debido a la postura de rechazo de Bogotá a la irrupción por la fuerza que hizo la Policía ecuatoriana en la Embajada de México en Quito, para llevarse detenido al exvicepresiente Jorge Glas, en abril pasado.
La ministra de Energía ecuatoriana, afirmó que hasta el último minuto creyó que era posible lograr un acuerdo con Bogotá. «Estamos viendo que en una situación como la que nosotros estamos con 14 horas de suspensión y viendo sus embalses y viendo la entrada de lluvia, creíamos que era posible», lamentó.
Manifestó que, «aunque hay toda la voluntad política», la nación vecina no puede venderles energía «a los 18 millones de ecuatorianos que la necesitamos».
Al referirse a las razones para la negativa, dijo que su par argumentó que debían «proteger sus embalses para el estiaje [nivel más bajo del agua por la sequía] que tienen en camino».
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«Están en todo el derecho, son soberanos, este es un tema de administración de recursos», dijo Manzano, quien agregó que también se ha abierto la puerta para conversaciones con empresas privadas colombianas que generan electricidad a partir de combustible líquido.
Por su parte, el canciller colombiano adelantó que «hay algunos arreglos regulatorios que pueden servir para que haya un intercambio más fluido» entre los dos países.
Murillo, manifestó que ambos ministros van a trabajar a partir de este miércoles en «un plan de trabajo para definir una hoja de ruta» y que «ambos coincidieron en que lo más importante es tener una estrategia de largo plazo para interconexión eléctrica y energética».