El presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, celebró este viernes que la nación caribeña, se haya unido a los BRICS en calidad de país socio, ya que la adhesión constituye una esperanza para los países del Sur.
El mandatario cubano escribió: «A Cuba le honra entrar como país socio en los BRICS, cinco letras y una gran esperanza para los países del Sur, en el arduo camino hacia un orden internacional más justo, democrático, equitativo y sostenible».
Por su parte, el canciller cubano, Bruno Rodríguez, destacó este viernes que con la entrada de su país al bloque, se reafirma el «interés y compromiso de incorporarse y trabajar junto a sus miembros en defensa de multilateralismo, paz, Derecho Internacional y construcción de agenda de desarrollo y cooperación que responda a prioridades del Sur».
A principios de esta semana, el presidente cubano, enfatizó el papel clave que juega el BRICS como actor en el ámbito mundial, al tiempo que lamentó no poder asistir personalmente a la cumbre del bloque, celebrada en Kazán, ya que debía ponerse al frente de la coyuntura energética que atravesó la isla por la «desconexión total» de su sistema eléctrico y el paso del huracán Óscar.
Díaz-Canel, dijo que «Al presentarse esta situación de emergencia eléctrica y la alarma ciclónica, hemos decidido no participar y permanecer aquí en el país, pero vamos a estar dignamente representados [en Kazán] y la delegación cubana está encabezada por nuestro canciller, Bruno Rodríguez», apuntó.
Puedes leer: Irán ordena a sus Fuerzas Armadas prepararse para la guerra
El director general de Asuntos Bilaterales de la Cancillería del país caribeño, Carlos Miguel Pereira, informó el pasado 8 de octubre que La Habana había solicitado oficialmente su incorporación al bloque en un nuevo formato para los BRICS, de país socio.
Según explicó, el pedido se realizó a través de una misiva dirigida al presidente ruso, Vladímir Putin, cuya nación ostenta la presidencia del grupo este año. La asociación de los BRICS, según el funcionario, «se consolida como actor clave en la geopolítica global y esperanza para los países del Sur».