La comunidad se encuentra en estado de shock tras la reciente respuesta de Disney a la familia de Kanokporn Tangsuan, una doctora que falleció después de sufrir una reacción alérgica en uno de los restaurantes del parque temático Disney Springs. La respuesta de la compañía ha sido calificada como “absurda” y “desconcertante” por los abogados de la familia.
El trágico incidente ocurrió en octubre de 2023, cuando Tangsuan, de 34 años, cenaba con su esposo, Jeffrey Piccolo, en el Raglan Road Irish Pub. A pesar de haber informado repetidamente al personal del restaurante sobre sus alergias a los frutos secos y productos lácteos, Tangsuan sufrió una reacción anafiláctica fatal poco después de consumir su comida.
Devastado por la pérdida de su esposa, Piccolo presentó una demanda contra Disney, acusando a la empresa y al restaurante de negligencia por no atender adecuadamente las advertencias sobre las alergias de Tangsuan. La demanda exige más de 50,000 dólares en daños y perjuicios, incluyendo compensaciones por el dolor y sufrimiento, la pérdida de ingresos y los gastos funerarios.
En lugar de enfrentar directamente las acusaciones de negligencia, Disney ha intentado desestimar la demanda invocando un acuerdo de arbitraje obligatorio. Según la compañía, Piccolo aceptó resolver cualquier disputa a través de arbitraje privado al suscribirse a una prueba gratuita de Disney+ en 20192. Este argumento ha sido calificado como “inimaginable” por el abogado de Piccolo, quien sostiene que un acuerdo relacionado con la suscripción a un servicio de streaming no debería aplicarse en un caso de negligencia que involucra la muerte de una persona.
La respuesta de Disney ha generado indignación y sorpresa tanto en la comunidad como en los medios de comunicación. Los abogados de Piccolo han criticado duramente la postura de la compañía, calificándola de “irrazonable” y «desconectada de la realidad». Por su parte, Disney ha defendido su posición, argumentando que los términos y condiciones aceptados por Piccolo son claros y vinculantes.
Este caso ha reavivado el debate sobre la responsabilidad de las grandes corporaciones y la validez de los acuerdos de arbitraje en situaciones de la vida real. La comunidad espera que se haga justicia y que se tomen medidas para evitar que tragedias como esta vuelvan a ocurrir.