El gobierno ruso ha prohibido el acceso por internet a 81 medios de comunicación europeos, en una medida que ha generado una fuerte reacción internacional. Esta decisión, anunciada por el Ministerio de Exteriores ruso, se presenta como una respuesta a las sanciones impuestas por la Unión Europea a varios medios rusos.
El Ministerio de Exteriores de Rusia justificó la prohibición como una represalia por las restricciones europeas impuestas a tres medios de comunicación controlados por el Kremlin: la Agencia RIA Nóvosti, y los diarios Izvestia y Rossískaya Gazeta. Estas sanciones europeas fueron parte de un paquete de medidas adoptadas en respuesta a la invasión rusa de Ucrania.
Entre los medios europeos afectados por la prohibición se encuentran importantes cabeceras de varios países. En España, los medios vetados incluyen a RTVE, la Agencia EFE, El País y El Mundo. Otros medios destacados en la lista son el diario alemán Die Zeit, la revista Der Spiegel, los italianos La Stampa y La Repubblica, el portugués Público, y los franceses Le Monde y Liberation.
La medida ha sido criticada por diversas organizaciones de derechos humanos y defensores de la libertad de prensa, quienes la ven como un intento de silenciar la cobertura crítica de la invasión rusa de Ucrania2. La Unión Europea ha condenado la prohibición, calificándola de “escalada” en la guerra de información entre Rusia y Occidente.
El Ministerio de Exteriores ruso ha subrayado que esta decisión es una respuesta directa al “acoso políticamente motivado” contra los periodistas rusos y la prohibición “infundada” de los medios rusos en territorio europeo. La portavoz de Exteriores, María Zajárova, advirtió previamente que Moscú tomaría represalias contra los corresponsales occidentales si la UE continuaba restringiendo la labor de los medios rusos1.
Esta prohibición representa un nuevo golpe a la libertad de prensa en Rusia, donde ya se han implementado severas restricciones a los medios de comunicación independientes y extranjeros desde el inicio de la invasión a Ucrania en 2022. Los ciudadanos rusos ahora tienen acceso limitado a fuentes de información externas, lo que dificulta la obtención de una visión completa y objetiva de los acontecimientos internacionales.
En resumen, la decisión del gobierno ruso de vetar el acceso a 81 medios europeos es una respuesta a las sanciones impuestas por la Unión Europea y refleja las crecientes tensiones en la guerra de información entre Rusia y Occidente. Esta medida ha sido ampliamente condenada y plantea serias preocupaciones sobre la libertad de prensa y el acceso a la información en Rusia.