El presidente francés, Emmanuel Macron, recibió este viernes en el Palacio del Eliseo (sede del Gobierno) a su homólogo argentino, Javier Milei, quien se encuentra de visita en la capital francesa para asistir a la inauguración de los Juegos Olímpicos.
De acuerdo con la Presidencia francesa, las dos naciones se plantearon aprovechar la visita oficial del mandatario libertario para estrechar lazos en diversas materias, que incluyen transición energética, cultura, ciencia y defensa, refiere EFE.
Fuentes del gobierno argentino, dijeron a La Nación que si bien no se divulgó una agenda oficial del encuentro, se preveía que en el diálogo se abordaran asuntos como el paralizado tratado de libre comercio entre la Unión Europea y el Mercosur, inversiones y el establecimiento de las polémicas sociedades anónimas deportivas, que supone la gestión de equipos deportivos como entidades empresariales.
Por la apretada agenda de Macron, se descartó una conferencia de prensa conjunta y también se advirtió que no habría «ni la menor intervención presidencial» de alguna de las partes sobre lo conversado, puntualiza un comunicado del Ejecutivo francés citado por ese medio.
La visita de Milei no fue del todo bien recibida en París, donde las organizaciones Asamblea de Ciudadanos Argentinos en Francia y Argentinos en Lucha organizaron una campaña de colocación de afiches en monumentos, calles y comercios para repudiar su presencia.
Por las redes sociales circularon imágenes con la leyenda «Milei persona non grata», acompañada de un dibujo del mandatario con el ceño fruncido y los ojos desorbitados, una expresión con la que se le ha capturado numerosas veces en fotografías y videos.
La bilateral entre los jefes de Estado, se produce tras una intensa polémica que involucró a la vicepresidenta, Victoria Villarruel, quien defendió los cánticos racistas y xenófobos que entonaron jugadores de la selección argentina de fútbol contra sus pares franceses y calificó a la nación gala de colonialista.
La funcionaria intentó luego matizar sus expresiones al asegurar que solamente había tratado de «defender a la selección argentina y a los argentinos», pero el ‘impasse’ derivó en críticas de Milei y obligó a una visita de la secretaria de la Presidencia, Karina Milei, a la legación diplomática para ofrecer disculpas.
Las tensiones entre los dos países, se extienden al enfoque negacionista del Ejecutivo mileísta sobre los detenidos-desaparecidos de la última dictadura militar (1976-1983), pues abogados de desaparecidos franceses han exigido a Macron el repudio público de la visita que hicieron diputados oficialistas de La Libertad Avanza a Alfredo Astiz, un represor condenado a cadena perpetua.