La papaya es una fruta tropical que se cultiva en varias zonas de Nicaragua.
En el municipio de Nandaime, departamento de Granada, cuenta con comunidades donde sus habitantes se dedican a esta actividad agrícola con el acompañamiento técnico de instituciones del gobierno de Nicaragua.
El cultivo de la papaya, ha tenido un crecimiento en todo el mundo en los últimos años, debido a la demanda de los consumidores de los frutos por sus propiedades nutritivas, medicinales y sabor.
En la comunidad La Granadilla, ubicada al noreste del municipio, en la finca Buenavista, propiedad de la familia Chévez se cultiva papaya desde hace varios años, rubro que le ha permitido obtener excelentes resultados. Uno de los miembros de esta familia es Jairo Antonio Chévez, quien actualmente cuenta con 5 manzanas cultivadas de la variedad Bela Nova, cuyas plantas florecen desde los 4 meses y pueden realizar el primer corte del fruto a los 5 meses y medio de edad y señaló que se dedica a la agricultura desde hace más de 20 años, pero en el cultivo de papaya lleva solamente 2 años.
“Es un bonito rubro, genera trabajo a los muchachos que están conmigo y está dando buenos resultados”, indicó Chévez.
Este productor está muy contento con este cultivo, porque es una planta que da más de 60 papayas y su productividad estará en dependencia del apoyo que se le brinde en fertilizantes, agua y fumigación.
Además, cuenta con el acompañamiento de instituciones de gobierno como el Instituto Nicaragüense de Tecnología Agropecuaria (INTA) y principalmente tienen el acceso a crédito para poder sacar adelante este tipo de cultivo.
“Como productor hay bastante motivación del Gobierno y nos sentimos satisfechos, también con el invierno, porque si no hay agua no hay cómo levantar cosecha”, apuntó.
El técnico transferencista de INTA-Granada, Marco Pavón Espinoza, manifestó que están acompañando a los productores de papaya de esta comunidad para garantizar que saquen una excelente producción usando productos amigables con el medio ambiente y el consumidor tenga aceptación en el consumo de esta fruta.
“Con la asesoría que les hemos brindado ellos garantizan una plantación sana, mejoran la rentabilidad, por ende mejores ingresos, mejoras en la economía familiar y este rubro ha sido una buena alternativa para el productor”, puntualizó.
