Hombres desconocidos atacaron el domingo con explosivos el cuartel de la Policía de la ciudad mexicana de Acapulco, estado de Guerrero. Fue una jornada violenta para la jurisdicción, puesto que también se encontraron los cadáveres de ocho personas, cinco de los cuales estaban desmembrados, recogen medios locales.
Según el reporte policial, los atacantes arrojaron tres petardos a la sede policial ubicada en la colonia Emiliano Zapata. Dos artefactos explotaron en los dormitorios de los agentes, mientras que el tercero cayó en el patio del establecimiento y fue confiscado por las autoridades. Hasta el momento no se han reportado víctimas en este ataque, solo daños materiales.
En un principio, circuló una versión de que los petardos habían explotado en el interior de la cárcel Tres Cruces del Centro de Readaptación Social (Cereso), que se encuentra a un costado del cuartel afectado. Además, se barajaba la versión de que se trató de un ataque con drones. Posteriormente, se aclaró que los explosivos fueron lanzados por individuos desde la calle.
Tras lo sucedido, la Fiscalía del estado abrió una investigación por el delito de daños a la propiedad. Las fuerzas de los tres niveles del Gobierno desplegaron «un fuerte operativo de búsqueda» y delimitaron la zona, informaron medios locales.
Por otro lado, los restos desmembrados de dos personas fueron hallados en diferentes puntos de Acapulco. Además, las partes de otros tres cadáveres aparecieron en bolsas negras en una caseta de peaje de la Autopista del Sol. Mientras que en la ciudad de Zihuatanejo, localizada también en el estado de Guerrero, fue encontrado el cuerpo de un hombre de 40 años.
Durante el mes de junio las autoridades registraron 77 homicidios dolosos en Acapulco. Además, mayo, antes de las elecciones generales, fue el mes más violento del año en México con 2.657 homicidios, 676 en Guerrero, la octava cifra más alta de los 32 estados del país.