UAE Team Emirates lidera la ascensión, revela las debilidades de los favoritos, a quienes logra aislar, mientras su líder exhibe fortaleza en el primer puerto especial para recuperar el maillot amarillo.
El emperador se mostró en el Galibier para sentenciar. Tadej Pogacar, el ciclista impecable, récord devorador, ganador del Giro de Italia, coronó una actuación conjunta de su equipo para superar a Jonas Vingegaard, sumar su duodécima victoria en el Tour de Francia (igualando a Indurain) y recuperar el maillot amarillo dominando a sus rivales.
Un ataque contundente cerca de la cima del coloso alpino inició el mano a mano del cual el danés resultó en segundo lugar. Vingegaard queda a 50 segundos de Pogacar en la clasificación general. Remco logró asegurar la segunda posición, mientras que un destacado y sólido Ayuso cruzó tercero para posicionarse bien en la general.
El UAE Team llegó con advertencias tras no liderar en San Luca. Necesitaban demostrar su dominio y desplegaron toda su potencia en el primer puerto significativo del Tour. Sin fisuras, con el objetivo claro de la victoria.
Tim Wellens y Marc Soler impusieron el ritmo en las duras rampas iniciales del Galibier (23 km al 5,1%). Sivakov siguió, con Jorgenson y Vingegaard en su estela. El estadounidense era el último apoyo del danés cuando comenzó la sección más exigente de la ascensión, a nueve kilómetros de la cima, y pronto quedó descolgado. Detrás, el UAE Team con Almeida, Yates, Pogacar y Ayuso desplegaba su artillería. De los ocho de cabeza, cuatro eran del UAE.
Enric Mas ya había cedido, explotando y olvidándose de la general en la cuarta etapa al entrar a 4:40 de Pogacar. Carlos Rodríguez y Bernal resistieron el asedio del equipo blanco en la parte trasera del grupo. A cuatro kilómetros de meta, Ayuso hizo su movimiento, dejando a Vingegaard completamente aislado y forzando a Roglic a aguantar como pudo en el grupo principal. El líder Carapaz ya era historia desde hacía tiempo.
En un ataque decisivo, Pogacar lanzó su ofensiva con determinación cuando faltaban 900 metros para coronar. Vingegaard intentó seguir su rueda, pero mostró debilidad en el segundo tramo y cedió. Roglic y Remco ya estaban fuera de la contienda. Pogacar inició el descenso con una ventaja de 10 segundos.
El descenso fue vertiginoso. Pogacar descendió como una flecha, decidido a alcanzar la gloria y afirmar su dominio. Vingegaard resistió, pero finalmente cedió terreno y fue alcanzado por Carlos Rodríguez, quien demostró una vez más ser uno de los mejores bajadores del World Tour y líder del Ineos.
Con la entrada a Francia, Pogacar viste el radiante maillot amarillo, con un sólido Remco a 45 segundos y Vingegaard en tercer lugar a 50 segundos. Juan Ayuso destaca como el mejor español, en cuarto lugar a 1:10 de su líder. El emperador está decidido a reclamar su corona.