Se celebrará en la capital colombiana entre el 20 y 26 de junio.
La Oficina de la Consejería Comisionada de Paz (OCCP), informó el lunes que se prevé que el 5to Ciclo de Diálogos de Paz con las disidencias de las FARC del Estado Mayor Central (EMC), parte de este grupo que todavía sigue negociando.
El origen del conflicto entre las FARC (Fuerzas Revolucionarias de Colombia) y el gobierno se remonta a un período de violencia conocido como “La Violencia”, que ocurrió entre 1948 y 1953. Este conflicto civil comenzó con el asesinato de Jorge Eliécer Gaitán, candidato del Partido Liberal, y desencadenó una década de inestabilidad política y persecución en Colombia.
Durante este tiempo, se crearon dos guerrillas importantes: las FARC y el Ejército de Liberación Nacional (ELN). Las FARC surgieron en la zona campesina de Tolima, escindiéndose de los liberales para declararse comunistas. Su resistencia se fortaleció en respuesta a la Operación Soberanía del ejército colombiano en Marquetalia. En las décadas siguientes, las FARC crecieron y llegaron a contar con unos 35,000 miembros en su punto máximo en 2008.
El anuncio, surge después de confirmarse la división del EMC en dos grupos: el más beligerante, comandado por “Iván Mordisco” que está desatando una oleada de violencia especialmente en el Cauca y en el sur del país, y otro menor que sigue en la mesa.
Según la OCCP, el grupo agresivo ha protagonizado varios ataques a estaciones de policía y a objetivos militares en el departamento del Cauca, por lo que el Gobierno ha emprendido una ofensiva contra ellos, mientras que las negociaciones con el segundo grupo parecen retomarse y el cese al fuego sigue vigente con ellos.
El jefe negociador del Gobierno, Camilo González Posso afirmó que: «Son contrastes lo que va en la mesa con conservancia del cese al fuego, con transformaciones territoriales como apuesta, de la construcción de una agenda de paz, y lo que está sucediendo en el departamento de Cauca y en el sur de país con acontecimientos de escalamiento de violencia”.
González denunció también la «matanza horrible» ocurrida en San José de la Fragua, entre los departamentos de Caquetá y Putumayo, donde ha habido «una situación gravísima”. «Esto afecta a la población, eso no es una simple situación entre fuerzas irregulares que se matan, genera pánico en la población, afecta a las comunidades», añadió el jefe negociador.
Los ataques de ese grupo disidente se han intensificado luego de que en marzo pasado el Gobierno suspendiera el cese el fuego bilateral en los departamentos de Nariño, Valle del Cauca y Cauca por la violencia de ese grupo armado contra indígenas y contra la fuerza pública.
En respuesta, el Ejército ha aumentado sus operaciones ofensivas en los últimos meses, convirtiéndose en uno de los escollos de las negociaciones de paz entre el Gobierno y el EMC. Sin embargo, se han seguido realizando acciones negociadoras, pues «la paz a pesar de estos retos es una tarea impostergable», concluyó el funcionario.