Kylian Mbappé podría empezar en el banquillo de suplentes cuando el Paris Saint-Germain, líder de la liga de Francia, se enfrente al colista Clermont.
Mbappé lidera la tabla de goleadores de la Ligue 1 con 24 tantos, mientras que Clermont tiene la segunda peor defensa de los 18 equipos de la primera división, habiendo encajado 46 goles. Esta situación presenta una oportunidad ideal para que el máximo goleador en la historia del PSG, autor de 251 goles, aumente su cuenta.
Sin embargo, el técnico Luis Enrique tiene otros planes.
Su máxima prioridad es el choque de la próxima semana contra el Barcelona en la ida de los cuartos de final de la Liga de Campeones en el Parque de los Príncipes.
El entrenador español ha demostrado su autoridad en las últimas semanas, ya sea dejando a Mbappé en el banquillo o sustituyéndolo durante partidos importantes.
Muchos quedaron perplejos cuando Mbappé fue sustituido al descanso frente al Mónaco el 1 de marzo con el marcador 0-0.
El domingo pasado, el campeón mundial en Rusia 2018 quedó atónito cuando Luis Enrique lo sacó a mitad del segundo tiempo del clásico contra el Olympique de Marsella.
«Es la misma situación cada semana», respondió Luis Enrique cuando le preguntaron sobre la sustitución. «Es bastante agotador. Soy el entrenador, tomo decisiones todos los días y seguiré haciéndolo cada semana hasta mi último día en París. Siempre trato de encontrar la mejor solución para mi equipo».
Mbappé no fue el único sorprendido por la audacia de Luis Enrique.