La bebé murió de hambre y deshidratación severa.
Kristel Candelario, de 31 años, fue condenada a cadena perpetua tras declararse culpable, de los cargos relacionados a la muerte de su hija de 16 meses, identificada como Jailyn.
La mujer admitió que dejó a su hija sola y sin cuidado dentro de la casa del 8 al 16 de junio de 2023, lapso en el que supuestamente estuvo de vacaciones en Puerto Rico y Detroit. Según los documentos judiciales.
Las autoridades, han dicho que Candelario dejó a su hija, Jailyn, en su residencia de Cleveland y se fue de vacaciones a Detroit y Puerto Rico en junio de 2023. Volvió a casa 10 días más tarde, y cuando se dio cuenta que la niña no respiraba llamó al número de emergencias 911. Los socorristas descubrieron que la menor estaba sumamente deshidratada y poco tiempo después la declararon muerta.
El juez del Tribunal de Litigios Ordinarios del condado, Brendan Sheehan, le dijo a Candelario que había cometido “la traición máxima” al dejar a su hija sola y sin comida.
“Así como no permitió que Jailyn saliera de su confinamiento, usted también debe permanecer el resto de su vida en una celda privada de su libertad”, declaró Sheehan. “La única diferencia será que al menos en la prisión le darán la comida y los líquidos que usted le negó a ella”.
La niña pesaba 13 libras, lo que representa una disminución de 7 libras desde su última visita al médico menos de dos meses antes de su deceso, añadió la forense.