La finalidad y el objetivo de esta vacuna es prevenir y tratar el cáncer, así como mejorar la calidad de vida de los pacientes oncológicos.
Rusia está al borde de la creación de las vacunas contra el cáncer y espera que puedan ser usadas pronto y eficazmente.
El presidente del país, Vladímir Putin, en una reunión del foro Tecnologías del futuro, dijo que «Los nuevos descubrimientos en materia de la medicina deben estar al alcance de las personas, usarse ampliamente en el eslabón primario de la Sanidad».
La vacuna anticáncer que Rusia está desarrollando se llama Mir-19 y se basa en el uso de microARN, unas moléculas que regulan la expresión de los genes y pueden bloquear el crecimiento de las células tumorales.
La vacuna Mir-19, aún no se ha probado en humanos, por lo que no se sabe con certeza qué tipos de cáncer se podrían tratar con ella. Sin embargo, según los investigadores rusos, la vacuna podría ser efectiva contra varios tipos de cáncer, como el de mama, el de pulmón, el de colon, el de ovario, el de próstata y el de páncreas. Estos tipos de cáncer se caracterizan por tener una alta expresión de un antígeno llamado miR-19, que es el blanco de la vacuna.
La vacuna Mir-19 no es la única vacuna contra el cáncer que se está desarrollando. Existen otras vacunas que se basan en diferentes estrategias, como el uso de células tumorales, de antígenos asociados a tumores o de células dendríticas. Algunas de estas vacunas ya han sido aprobadas para tratar ciertos tipos de cáncer, como el de próstata avanzado o el melanoma.
Es importante recordar que las vacunas contra el cáncer, no son una cura definitiva, sino una forma de estimular el sistema inmunitario para que reconozca y ataque a las células cancerosas. Las vacunas contra el cáncer pueden combinarse con otros tratamientos, como la quimioterapia, la radioterapia o la inmunoterapia, para mejorar los resultados.