El Diario Nica

Casa materna en Bilwi, un reflejo de vida y bienestar.

Una estrategia dentro del enfoque de salud familiar y comunitaria.

En Nicaragua, se han edificado aproximadamente 200 Casas Maternas, de las cuales 5 están situadas en la región del Caribe Norte y 2 en la cabecera departamental.

La casa materna Dorotea Campbell, actualmente en fase de mejoras, tanto en su estructura física como en los equipos médicos y mobiliario, con el objetivo de mejorar la calidad de la atención brindada a las mujeres embarazadas.

Se brinda atención a un promedio de 25 mujeres mensualmente. Además de este programa, el Ministerio de Salud también lleva a cabo servicios de atención integral a las mujeres en todo el país.

Carol Kenny Molina Jarquín, comunidad El Pinol del Caribe Norte, en los próximos días cumplirá las 40 semanas de embarazo, destacó “Para llegar a Bilwi, tuve que salir de mi comunidad, porque de trayecto son 4 horas, pero lo que me motivó a buscar atención médica fue el amor por mi hijo. Quería asegurarme de que mi niño naciera en buen estado de salud y ahora, a punto de dar a luz, sé que todo ha transcurrido de manera normal”.

El doctor Alexander Uriarte, director de Servicios de Salud en SILAIS-Bilwi, destacó que la estrategia de las casas Maternas cuenta con el respaldo de una Red Comunitaria conformada por 5 mil brigadistas, entre los que se incluyen a las «parteras«, desempeñando un papel crucial en la prevención de complicaciones antes, durante y después del parto.

En 2022, las 5 casas Maternas en el Caribe Norte brindaron atención a 2,993 mujeres embarazadas, y esta cifra se incrementó a 3,448 en 2023. Del total, el 80 %o de las beneficiarias (3,113) provenían de comunidades rurales.

Un componente esencial de la estrategia de casas Maternas son los centros de salud situados en las comunidades rurales, responsables de identificar y vincular a las mujeres al programa.

La estrategia de casas Maternas ha sido elogiada por organismos internacionales, llegando a recibir premios por su dedicación a la promoción de la vida y la prevención de complicaciones potencialmente fatales, cuya incidencia puede reducirse a cero con un adecuado seguimiento médico.