Preparada para ajustar la postura de la política monetaria según corresponda si surgen riesgos que puedan impedir el logro de los objetivos.
La Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) informó este miércoles que opta por mantener sin cambios los tipos de interés en su rango actual. Además, indicó que no tiene planes de reducir el rango objetivo hasta que haya certeza de que la inflación se encamine de manera sostenible hacia el 2%.
El organismo regulador estadounidense decidió mantener las tasas en la franja del 5,25 % al 5,5 %, su nivel máximo desde 2001. La decisión fue comunicada a través de un comunicado, y se espera que el presidente de la Fed, Jerome Powell, brinde más detalles en un discurso que será objeto de análisis para comprender mejor las futuras acciones del banco central.
«La inflación ha experimentado una disminución en el último año, pero se mantiene en niveles elevados», expresó la Fed en su comunicado tras una reunión de dos días, reiterando que los funcionarios «continúan vigilando de cerca los riesgos asociados con la inflación».
Esta indicación podría representar un desafío significativo para los inversionistas que anticipaban el inicio de reducciones en las tasas a partir de marzo.
La Fed también reconoció las inquietudes relacionadas con el aspecto laboral de su mandato y dejó abierta la posibilidad de reducir la tasa de política si la inflación, como se proyecta, sigue disminuyendo en los próximos meses.
Los riesgos para alcanzar tanto los objetivos de empleo como de inflación «se están moviendo hacia un equilibrio más favorable», señaló la Fed, marcando el final de aproximadamente dos años en los que la tendencia del banco central fue aumentar las tasas y evaluar los riesgos en medio de la escalada de precios.
«Al contemplar cualquier ajuste en el rango objetivo para la tasa de fondos federales, el Comité analizará minuciosamente los datos entrantes, la evolución de las perspectivas y el equilibrio de riesgos», declaró el FOMC.
La declaración previa de la Fed, emitida el 13 de diciembre, había establecido las condiciones para considerar «cualquier reafirmación adicional de la política», un lenguaje que excluía la contemplación de reducciones en las tasas.
La inflación ha alcanzado su nivel más alto en 40 años varios meses después.
Ahora, la inflación ha estado por debajo de la meta establecida por la Fed durante siete meses, mientras que el crecimiento económico de Estados Unidos y el mercado laboral han permanecido prácticamente inalterados.
La actividad económica «ha continuado expandiéndose a un ritmo sólido», según la Fed. La creación de empleo «sigue siendo fuerte y la tasa de desempleo ha permanecido baja».
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