La icónica actriz de 85 años, ha compartido abiertamente sus reflexiones sobre el amor, las relaciones y el envejecimiento en una reciente entrevista en el podcast Absolutely Not. Afirmó que, a su edad, no tiene interés en buscar nuevas relaciones sentimentales, expresando humorísticamente: «Estoy acabada, incluso en la oscuridad no quisiera estar desnuda delante de nadie».
Sin embargo, Fonda sorprendió a muchos al señalar que, en caso de decidir tener un amante en el futuro, preferiría que fuera considerablemente más joven. A pesar de su aversión a la piel envejecida, admitió que le resulta atractiva la idea de la juventud. Con su cumpleaños número 86 a la vuelta de la esquina, reveló que prefiere la compañía de alguien de 20 años porque, según sus propias palabras, «no le gusta la piel vieja».
A pesar de estas declaraciones, la estrella de Barbarella dejó claro que no aprueba las relaciones en las que existe una gran diferencia de edad, argumentando que no podría poner a nadie en esa posición. Por esta razón, ha decidido permanecer sola por el resto de su vida, aunque confiesa que de vez en cuando echa una «ojeada» a hombres jóvenes.
En cuanto a su vida personal, Jane Fonda ha estado casada tres veces y ha encontrado una manera peculiar de manejar el duelo. Después de sus divorcios, escribió cartas a sus ex parejas como una forma de liberar sus sentimientos. Reveló que, a pesar de las dificultades iniciales, mantiene buenas relaciones con su último esposo, Ted Turner, y sigue siendo cercana a los cinco hijos de él.
La actriz también compartió su enfoque sin miedo hacia la muerte, destacando que se siente centrada y en paz con el transcurso de su vida. Fonda, rodeada en su mayoría de amistades femeninas más jóvenes, declaró que está en un buen lugar emocional y que, si muriera mañana, se sentiría bien, sin grandes traumas.
Incluso ha planeado detalladamente su propio funeral, con invitados, música y otros aspectos, todo imbuido con su característico sentido del humor. Jane Fonda demuestra que enfrenta la vida y la muerte con una actitud valiente y humorística, disfrutando plenamente de cada etapa de su existencia.