El centro histórico de Granada, guarda verdaderas joyas, auténticos tesoros de nuestro patrimonio que no te puedes perder en tu visita a Granada.
En el recorrido, podes encontrar monumentos de las civilizaciones y momentos históricos más importantes de la historia, no en vano esta es tierra de artistas y poetas.
La Catedral de Granada, fue considerada octava maravilla del mundo en el siglo XVI. Es uno de los iconos del Renacimiento granadino, junto con el Palacio de Carlos V y la cabecera de San Jerónimo. Expresa maravillosamente el cambio de pensamiento que significó el Renacimiento en el arte y en la forma de entender la vida.
Alberga grandes piezas de la obra del escultor, pintor y arquitecto granadino Alonso Cano. Además, en la Capilla Real, fundada en 1504, puede verse el sepulcro de los Reyes Católicos. Aquí, Fernando aparecerá representado como el soldado inteligente y valiente que fue, mientras que en Isabel destaca su fuerte personalidad y su determinación. Todo ello está incluido en nuestra Visita Guiada a la Catedral y la Capilla Real de Granada.
La Capilla Mayor, destaca especialmente en cuanto a su amplitud y diafanidad, con un diámetro de 22 metros y una original disposición en forma de amplia rotonda, que permite asistir al culto desde muchos puntos del edificio, a diferencia del resto de catedrales medievales, cuya disposición es absidal. La preside un tabernáculo, regalo del duque de San Pedro de Galatino, y la corona: una gran bóveda a modo de representación celestial, decorada por estrellas doradas y que descansa sobre una serie de columnas corintias organizadas en dos pisos.
En estos pisos se encuentra dividida una serie de paños arqueados que separan pinturas abajo y vidrieras arriba, convirtiéndose en un enorme y magnífico soporte iconográfico en el que podemos admirar escenas de la Vida de la Virgen, del Nacimiento y de la Pasión de Cristo.
La Capilla Mayor, acoge a su vez importantes obras escultóricas tales como las figuras de los Apóstoles (también en policromía dorada), los bustos de Adán y Eva, obra de Alonso Cano, o las grandes figuras de los Reyes Católicos orando.
La Capilla Real, significa para el arte el paso de la época medieval a la moderna, del mismo modo que los Reyes Católicos lo significan en la transformación de España. En su composición, podemos apreciar cómo los primeros detalles renacentistas contrastan con el estilo gótico de la estructura, algo agotado ya.
Su fundación nos lleva a 1504, confirmada en el testamento de la reina Isabel en octubre del mismo año, un mes antes de su muerte. En un principio, la proyección del edifico, en pleno centro de Granada, recayó sobre Enrique de Egas en 1506, quien, influido por el Cardenal Cisneros, se comprometió a crear un edificio de extrema sobriedad. Además, se decidió que debía formar parte de la futura Catedral tanto física como estilísticamente.
El sepulcro de los Reyes Católicos, fue esculpido por el italiano Domenico Fancelli y conforma una obra especialmente singular para la escultura funeraria del Renacimiento en España.
Sobre las losas, las figuras yacentes de los monarcas nos presentan a Fernando como guerrero, con espada, coraza y capa. Por su parte, se presenta a Isabel, con traje cortesano, evocando la determinación de su carácter. Por otra parte, los de Felipe (el Hermoso) y Juana (la Loca), obra del escultor Bartolomé Ordoñez, muestran un estilo más ostentoso y con mayor presencia de elementos plásticos y sensibles.
Reja Mayor, es obra del rejero “maestre Bartolomé” (Bartolomé de Jaén), uno de los más notables representantes de este género de todos los tiempos.
Un gran escudo de los Reyes Católicos escoltado por los emblemas característicos del yugo y las flechas ocupan el segundo cuerpo central. A los lados, se sitúan los doce Apóstoles con sus atributos, mientras que, en la parte superior, destaca la crestería calada. Incorpora también escenas de la Pasión de Cristo que el propio Bartolomé decidió introducir al no ser parte de la idea original. Todo ello repujado y cincelado a doble cara y acompañado de un deslumbrante colorido que la hace especialmente deslumbrante.
Retablo Mayor de la Capilla Real, en este retablo, obra del escultor francés Felipe Bigarny, podemos apreciar la inclusión de una serie de relieves que rememoran la Rendición de Granada. Situada en la parte más baja del mismo, como el frontal del altar, se desarrolla ante nosotros la escena: la comitiva real y Boabdil entregando las llaves en la Puerta de la Justicia. A los lados, dos repisas sujetan las figuras orantes de Fernando e Isabel custodiados por San Jorge y Santiago, patronos protectores de ambas coronas.
La transformación en Cabildo Viejo, a principios del siglo XVIII el edificio se reconstruyó prácticamente al completo. A excepción de un oratorio árabe que quedó oculto, la inicial Madraza islámica desapareció, para dar paso a un nuevo conjunto civil de estilo Barroco Tardío. En 1858, el Consistorio fue trasladado a su actual ubicación (el convento del Carmen, actual Ayuntamiento), tras lo cual el edificio pasó a ser propiedad de los Echevarría. El Estado lo adquirió en 1939, y a partir de los años 40 fue cedido a la Universidad para usos institucionales.
De su pasado islámico queda el Oratorio nazarí, una característica qubba de planta cuadrada con preciosos ornamentos: ventanas germinadas, un alicer de mocárabes, e incluso algunas de las yeserías originales.
En el Salón de Caballeros Veinticuatro, en la planta superior, se conserva una impresionante armadura mudéjar que sobrevivió a las reformas de los últimos siglos. También se pueden apreciar las puertas que formaron parte del antiguo Oratorio del Cabildo.
El Corral del Carbón, es entre otras cosas, la única alhóndiga de Al-Andalus que se conserva en todo el territorio español. Originariamente el edificio es una auténtico Khan o Caravansar, para el alojamiento de mercaderes, aunque a lo largo de los siglos se ha adaptado a cantidad de usos distintos, entre ellos, el de almacén de grano y carbón, corrala de vecinos y Corral de Comedias.
Es uno de los edificios más importantes conservados del periodo nazarí de Granada, cuya pervivencia debemos agradecer a los múltiples usos que ha tenido a lo largo de la historia. El Corral del Carbón fue construido en el siglo XVI como Khan o Caravansar, edificio muy característico de las medinas musulmanas medievales, en el corazón del área comercial de la medina. Su nombre originario es el de al-fundaq al-yadida, o Alhóndiga Nueva, y es de hecho la única que se conserva del período nazarí. El nombre de Corral del Carbón aparece mencionado ya en 1531, por su función como almacén de carbón.
Plaza Nueva, el espacio público que compone la actual Plaza Nueva es el resultado de una dilatada evolución, única en la historia urbana de Granada, que se inicia en los comienzos del siglo XVI, y se prolonga hasta mediados del siglo XX. Es un enclave urbano que se ha ido conformando a lo largo del tiempo a partir de dos premisas: el cubrimiento progresivo del río Darro, que inicia en esta plaza su recorrido, oculto por el centro histórico de Granada hasta su desembocadura final en el río Genil, y la apropiación paralela de terrenos pertenecientes al caserío histórico circundante ha ido posibilitando el crecimiento constante de la plaza hasta alcanzar su extensión actual.
Real Chancillería y Cárcel Real, el establecimiento de la Real Chancillería en Granada forma parte del programa promovido por la monarquía hispana. Querían instalar las instituciones públicas, tras la conquista de Granada.
El actual inmueble del Ayuntamiento de Granada, ubicado en la céntrica plaza del Carmen, constituye un interesante edificio que ha pasado a lo largo del tiempo por diversas transformaciones.
Sobre la parte central del ático se ha alzado la estatua ecuestre de El instante Preciso. Este bello grupo escultórico de bronce patinado y pulido, que corona la fachada principal, fue encargado a Guillermo Pérez Villalta para la conmemoración del V Centenario de la constitución del Ayuntamiento de Granada. La obra representa a un caballo en marcha con tres de sus patas sobre esferas doradas y a un jinete desnudo montando sobre su grupa que, con los ojos vendados, sostiene en su mano derecha una cuarta.
La obra concebida como un emblema de felicidad, simboliza la consecución de un momento triunfal, de un perfecto, aunque a la vez fugaz, equilibrio. La ejecución material de la obra fue realizada por el escultor Ramiro Mejías.
La Calle Elvira: El eje urbano de la Granada Musulmana y Cristiana, fue la principal y más larga vía de la Granada islámica, desde su configuración urbanística en el siglo XI. Se iniciaba en la Puerta Elvira, abierta en el sector septentrional del recinto amurallado de la medina, y penetraba hasta el corazón de la misma, donde concluía, junto al cauce descubierto del río Darro.
Lonja de Mercaderes, adosada a los pies de la Capilla Real y como vestíbulo para su visita turística se encuentra la que fuera en origen Lonja de Mercaderes. Se trata de uno de los ejemplos más destacados de la arquitectura civil tardogótica.
Iglesia de Santa Ana, Presidiendo la popular Plaza Nueva, la Iglesia de Santa Ana fue erigida sobre la antigua mezquita zirí de la aljama Almanzora. Las obras de la iglesia se iniciaron en 1537 y 1540 siguiendo un proyecto de Diego de Siloé.
El interior responde a una sencilla planta de nave única, característica de las iglesias parroquiales granadinas del siglo XVI, con capillas laterales y amplísima cabecera, una hermosa armadura rectangular.
La Gran Vía de Colón, es actualmente, además de la principal arteria de nuestro centro histórico, un excepcional catálogo de la arquitectura granadina del primer tercio del siglo XX. Pasear hoy por ella constituye una grata experiencia que sumar a la de los espacios históricos de la ciudad.
La Gran Vía de Colón, una calle que en el presente ofrece un patrimonio arquitectónico excepcional de la burguesía. Desde la inauguración de la estación de ferrocarril de los Andaluces en 1874, el aumento de movimientos de personas y mercancías comenzó a exigir la creación de una comunicación rápida y directa entre este punto y el centro de Granada. Inicialmente, esta función circulatoria tuvo que ser asumida por calle Elvira, que resultaba ser una vía notoriamente insuficiente para permitir un tránsito fluido.
Palacio Arzobispal, el magno edificio del Palacio Arzobispal, o primitiva Universidad Literaria, fue la sede primera de la Universidad de Granada, erigida por el Emperador Carlos V en 1526. Su fundación tuvo lugar durante la conflictiva relación con los moriscos, admitiéndose la docencia como medio eficaz para su integración. En 1767, la Universidad se trasladó al antiguo colegio de la Compañía de Jesús. Hoy es el edificio de la Facultad de Derecho.
Centro José Guerrero, esta institución introduce una nota de modernidad en el centro monumental. Creada para acoger una fundación dedicada al más universal pintor granadino del siglo XX, José Guerrero. El inmueble fue del agrado de los herederos, por permitir una rehabilitación libre de taras y presentar una cierta semejanza con los edificios industriales usados como estudios en el Soho neoyorquino.
Aljibe de la Mezquita Mayor de Granada, En el rincón formado por la fachada de la Lonja y la Capilla Real, junto a la portada, se encuentra un pequeño brocal de piedra blanca detrás de una reja de hierro. Este es el único elemento visible del aljibe que perteneció a la mezquita mayor de la Medinat Garnata.
Granada es especialmente afortunada en la conservación de estos aljibes, ya que el Albaicín cuenta con un buen número de ellos, rehabilitados, saneadas y puestos en valor hace unos pocos años. La vinculación de los aljibes públicos a las mezquitas venía condicionada por la necesidad de realizar las abluciones antes de entrar a ellas y para servir a los vecinos en sus necesidades.
Monumento a Isabel la Católica, en el centro de la plaza Isabel la Católica se erige el monumento a Isabel la Católica y Cristóbal Colón, obra del famoso escultor Mariano Benlliure para la conmemoración del Cuarto Centenario del Descubrimiento de América. Inicialmente, fue colocado en la entrada del Paseo del Salón, pero, en 1961, el Ayuntamiento acordó trasladarlo a su actual emplazamiento.
El conjunto escultórico se eleva sobre un pedestal. En el plinto y frisos del mismo aparecen los nombres de numerosos personajes históricos relacionados con la conquista del reino y el descubrimiento de América.