El Banco Mundial en un informe reciente indicó que Europa se enfrenta a una crisis del costo de la vida.
La tasa de inflación española volvió a acelerarse, y los precios de los bienes de consumo, impulsados por el coste de los carburantes, subieron un 2,4% en agosto respecto al año anterior, informó el Instituto Nacional de Estadística (INE) del país ibérico.
Te puede interesar: Argentina y Brasil acuerdan pago de importación – El Diario Nica
En términos mensuales, los precios en España han aumentado un 0,5 % de julio a agosto. Con la subida de agosto, la inflación encadena dos meses consecutivos de ascensos, después de que en julio repuntara cuatro décimas, hasta el 2,3%, indicó el INE.
Por su parte, la inflación subyacente, que no cuenta los alimentos no elaborados ni los productos energéticos, se ha mantenido obstinadamente alta, aunque ha descendido una décima en su tasa interanual hasta el 6,1%, señaló el organismo.
Las cifras de la cuarta economía más grande de la región duplican con creces el nivel objetivo fijado por los responsables del Banco Central Europeo (BCE), que afirman que esos últimos datos como cruciales para la decisión del 14 de septiembre, cuando los responsables políticos determinarán si es necesaria una décima subida consecutiva de los tipos de interés para controlar la inflación en el viejo continente.
Las expectativas de inflación de los precios de consumo en otras regiones de Europa también están enviando una señal de advertencia, y la Comisión Europea indica una creciente preocupación sobre la zona euro y, especialmente, de sus cuatro principales economías (Alemania, Francia, Italia y España).
Por lo tanto, varios responsables europeos prevén una nueva alza de tasas de interés, según Bloomberg. Por ejemplo, Robert Holzmann, un halcón del BCE, declaró a ese medio estadounidense que está a favor de otra subida de tipos «si no hay grandes sorpresas«.
Aunque España ha registrado recientemente una de las tasas de crecimiento de precios más bajas de la región, incluso por debajo del 2% en junio, no todos los expertos se muestran optimistas y se calcula que esta tendencia se invertirá a finales de año al cambiar el efecto base.