En el zoológico de Juigalpa Chontales, se encuentra el primer puma albino diminuto de nariz rosada en Centroamérica.
Aunque los expertos aún debaten si el felino es leucino o albino, no hay duda de que su presencia es una verdadera joya en el mundo de la conservación.
Su pelaje blanco resplandece bajo los rayos del sol, creando una imagen digna de admiración. La puma con los ojos alerta y los oídos atentos, amamanta a su cachorro blanco como la nieve de un mes de edad.
“En el Zoológico Thomas Belt nace en cautiverio, uno de los cuatro únicos en el mundo”. Carlos Molina veterinario del recinto
Añadió que el cachorro está sano y come bien, y que los pumas albinos requieren muchos cuidados y son vulnerables a la luz solar.
El cachorro y sus dos hermanos de color beige y moteados se encuentran en una jaula sellada para que la madre no se estrese ni confunda los olores humanos con los de los recién nacidos, lo que podría provocar que los ataque.
Su pareja se mantiene en un espacio separado, ya que se sabe que los pumas machos matan a sus crías, el veterinario no ha tenido ningún contacto físico y se desconoce el sexo de la camada.
Una vez que los felinos cumplan tres meses, el zoológico planea mostrarlos al público en general el zoológico Thomas Belt recibe entre 50 mil y 60 mil visitantes cada año.
Este pequeño depredador con su pelaje blanco como la nieve; nos recuerda la importancia de preservar y proteger a todas las especies que comparten nuestro planeta así mismo nos invita a maravillarnos ante la asombrosa diversidad que la naturaleza tiene para ofrecer.
Los pumas se encuentran en toda América, desde la región alta andina del Sur, Perú y las selvas de Centroamérica.