La medida implementada por la autoridad de Texas, ya desató reacciones de indignación en Estados Unidos.
Como parte de las políticas para frenar la migración, el Gobernador de Texas, Greg Abbott, dio la orden a elementos de la Patrulla Fronteriza de empujar a niños pequeños y bebés lactantes de vuelta al Río Bravo.
De acuerdo con un reporte del diario Houston Chronicle, en el caso de solicitantes de asilo, queda prohibido ofrecerles agua, incluso en condiciones de calor extremo; según un correo electrónico de un policía del Departamento de Seguridad Pública (DPS, por sus siglas en inglés).
En el correo se documenta que la policía estatal fue testigo de varios incidentes de abuso contra migrantes en Eagle Pass. Sin embargo, la oficina de Abbott negó que alguna orden o directiva relacionada con la operación Lone Star (Estrella Solitaria) pusiera en peligro la vida de los migrantes; informó el portal Texas Public Radio.
El correo electrónico, dado a conocer en primera instancia por Hearst Newspapers, detalló cuentas del 3 de julio que ilustran un incidente a lo largo del río Bravo, no informado con anterioridad.
Sobre el tema, el representante demócrata Joaquín Castro manifestó en Twitter lo siguiente: “Es una política absolutamente monstruosa, inhumana. A las tropas del gobernador de Texas, Greg Abbott les han dicho que empujen a los niños de regreso al Río Grande para que se ahoguen”.
Cabe destacar, que desde el pasado 12 de julio de este año, las autoridades texanas comenzaron la colocación de un muro flotante en el Río Bravo, utilizando las enormes boyas; de acuerdo con lo proyectado se busca que abarque tres kilómetros con el fin de evitar el paso de migrantes.
La instalación de estos dispositivos forma parte del operativo de Estrella Solitaria que ha implementado Greg Abbott, en la frontera sur con México; donde se han reforzado las medidas de seguridad para disuadir o desalentar a los indocumentados.