Salio a buscar el pan de cada día, cuando le informaron que su casa ubicada en una comunidad de Diriamba se estaba quemando.
Las pérdidas fueron totales dentro de la vivienda, construida de minifalda, quemándose todos los enseres domésticos, y sobre todo un perrito de 2 años.
Se dieron cuenta que el canino murió calcinado, cuando un joven lo buscaba desesperadamente entre los enseres quemados.
Las niñas y niños lloraban insaciablemente, pues se había convertido en su mejor amigo.
En la casa habitan sus dos hijas y nietos quienes afortunadamente no se encontraban dentro al momento del siniestro.
Juan José Ney Bermúdez de 85 años, dueño de la vivienda quien narró que pese a su enfermedad y edad, sale todos los días a trabajar, ayudar a sus dos hijas con los gastos de la casa.
Así fue cuando sorpresivamente le avisaron que su casa estaba en llamas.
El incendio tuvo lugar en el sector de Quebrada Honda, camino hacia San Carlos, comunidad rural del municipio Diriamba.