Todo parece indicar que las conversaciones entre el Gobierno de Colombia y la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN) que se desarrollan en La Habana, Cuba, han llegado a un buen término y que las partes podrán presentar resultados prometedores, sobre todo, en lo que concierne al fin del fuego cruzado.
El pasado 25 de mayo, las delegaciones del Gobierno y del ELN informaron en un comunicado que habían acordado prorrogar las jornadas de diálogo, que terminarían a finales de ese mes, porque aún tenían temas importantes por desarrollar, como la participación de la sociedad en el proceso de construcción de paz, el cese al fuego y las acciones y dinámicas humanitarias a tomar.
En aquel momento las partes coincidieron que las conversaciones del tercer ciclo, que iniciaron el 2 de mayo y cierran este 8 de junio, han sido positivas, a pesar de la pausa que activó el ELN durante el proceso. Además, agradecieron al Gobierno y pueblo de Cuba, así como a los países garantes y acompañantes, su invaluable respaldo en la construcción de la paz de Colombia.
Precisamente este 8 de junio, fecha en la que se hará la clausura oficial de este ciclo, el presidente de Colombia, Gustavo Petro, llega a Cuba para firmar el documento con los acuerdos que las partes habrían pactado durante más de un mes de trabajo en La Habana.
Sobre su viaje a la isla caribeña, Petro adelantó: «Voy a algo que puede ser muy importante para la historia de Colombia. Voy a firmar un papel que puede significar el comienzo sin retroceso de una era de paz para este país”.
Los primeros dos ciclos de este diálogo se llevaron a cabo en Venezuela y en Ciudad de México. El primero, que se realizó entre el 21 de noviembre y el 12 de diciembre de 2022, culminó con un acuerdo para promover alivios humanitarios en algunas de las regiones más golpeadas por el conflicto armado.
La medida aplicaba especialmente para el Bajo Calima, en el departamento de Valle del Cauca, y el municipio Medio San Juan, del departamento del Chocó. Además, se pactó atender la emergencia humanitaria para un grupo de presos del ELN, afectados por la crisis carcelaria en Colombia.
El segundo ciclo, realizado del 13 de febrero al 10 de marzo pasado en México, cerró con el reconocimiento por parte del Gobierno del estatus político al ELN como «organización armada rebelde», y se dieron avances para lograr un acuerdo para el cese al fuego.