Decenas de miles de docentes rumanos se declararon en huelga exigiendo aumentos salariales y más inversión en educación.
Los principales sindicatos docentes convocaron a la huelga general que movilizó a 150.000 profesores y profesoras y entre 60.000 y 70.000 miembros del personal de apoyo de las escuelas.
Las y los maestros rumanos piden un aumento salarial ya que su remuneración actual no llega ni al sueldo medio nacional. Los profesores de nivel inicial en las escuelas públicas ganan en promedio alrededor de 480 euros al mes en promedio mientras que el sueldo medio nacional es de 804 euros (4000 leus rumanos).
El Gobierno del primer ministro, Nicolae Ciuca, trató de negociar hasta el último momento con los sindicatos para evitar el paro, y en una reunión de este domingo trató de convencerlos de que la reforma del funcionariado que prepara será suficiente para cumplir sus demandas.
Esta reforma, según informa el diario rumano ’Nepszava’, citado por Europa Press, se terminará de elaborar en julio y será presentada ante el Parlamento para su aprobación en septiembre.
La iniciativa propone un subsidio de 1.000 leus (201 euros) dos veces al año para aquellos profesores que inicien su carrera o que ejerzan en lugares con una población desfavorecida. Es decir se trata de un subsidio, no de un aumento salarial con sus respectivos aportres, que de todas maneras tampoco llega a cubrir lo que sería el nivel del salario medio.
Es por esto que las y los profesores lo rechazan señalando que no van a aceptar una “asistencia social”, como calificó a la propuesta oficial el presidente de los Sindicatos Libres de Educación, Marius Nistor, y piden que su salario se ajuste a la “importancia social” de su empleo, así como a la inflación y el aumento del coste de la vida.