El proyecto de ley sobre agentes extranjeros desató grandes protestas esta semana y ha dejado a más de 130 personas detenidas.
El partido gobernante Sueño Georgiano y el movimiento Fuerza del Pueblo anunciaron la decisión de revocar la controvertida ley de agentes extranjeros que detonó protestas multitudinarias en Tiflis.
El proyecto de ley sobre agentes extranjeros, que desató grandes protestas en Georgia esta semana, ha sido retirado del Parlamento. Asimismo «Decidimos revocar sin condiciones el proyecto de ley que habíamos apoyado», cita una declaración conjunta que las dos formaciones políticas.
La normativa en cuestión, aprobada en primera lectura el 7 de marzo, habría obligado a registrarse como «agentes de influencia extranjera» a las ONG, medios de comunicación y demás entidades que reciben al menos el 20% de sus fondos desde el exterior.
Los promotores de la ley la presentaron como una versión suave de la Foreign Agents Registration Act (FARA), promulgada en EEUU en 1938; los detractores alegaron que la normativa, similar a la aprobada en Rusia, alejaría a Georgia de la Unión Europea.
Las protestas masivas se iniciaron el martes después de que se aprobara por mayoría parlamentaria el proyecto de ley de agentes extranjeros en primera lectura. Ayer, los manifestantes también rodearon el Parlamento georgiano e intentaron irrumpir en el edificio. Las fuerzas del orden utilizaron cañones de agua y gases lacrimógenos para dispersar la protesta. Tras varios enfrentamientos con las fuerzas del orden, más de 130 personas fueron detenidas.
«Vemos que el proyecto de ley aprobado ha causado controversia en la sociedad. La maquinaria de la mentira ha conseguido presentar el proyecto de ley bajo una luz negativa y engañar a cierta parte de la población», indica el comunicado. «El proyecto de ley ha sido calificado falsamente de ‘ley rusa’ y su aprobación en primera lectura se ha presentado a los ojos de una parte de la opinión pública como una desviación del rumbo europeo», subraya.
La delegación de la Unión Europea en Georgia celebró el anuncio de que el partido gobernante decidió retirar la polémica ley de «influencia extranjera».
“Alentamos a todos los líderes políticos de Georgia a retomar las reformas pro-UE una manera inclusiva y constructiva y en línea con las 12 prioridades para que Georgia logre el estatus de candidato», tuiteó.
El partido Sueño Georgiano, principal promotor del proyecto, afirma que «las fuerzas radicales consiguieron implicar a algunos jóvenes en actividades ilegales». De igual manera, resaltó que sigue apoyando el proyecto de ley «sin reservas».
«Cuando se calme el trasfondo emocional, explicaremos mejor a la opinión pública por qué se aprobó el proyecto de ley y por qué era importante garantizar la transparencia de la influencia extranjera en nuestro país», concluyó.
Mientras, uno de los grupos parlamentarios de oposición dijo que las protestas van a continuar. «Seguro que habrá una acción hoy. Somos muchos los jóvenes que desconfiamos de Sueño Georgiano. Que aclaren cómo planean implementar la revocación y liberen a las personas que lucharon a nuestro lado», dijo a los periodistas Tsotne Koberidze, portavoz del partido Girchi.