Familiares de la mujer se muestran indignados y no descartan que el sujeto haya intentado violarla.
El taxista que mató a Nelly Argentina Romero y dejó abandonado su cuerpo en el barrio Arnoldo Alemán, en Managua, no solo está tras las rejas, sino que también confesó el crimen.
Pascuala Bojorge, mamá de la víctima, expresó “él me la mató porque quiso, ella tenía como que le habían dado con una piedra aquí en la cabeza, dijo que él la llevó, pero que le quiso robar, como ella no se dejó, vino y la iba a violar, ella forcejeó. Mi hija era bien enojada”.
Las uñas iban arrancadas, desgarradas, donde ella parece que iba arrastrándose, también llevaba golpes y rasguños.
Aunque en un primer momento se presumía que la víctima fue atropellada, la sospecha se avivó entre familiares al no encontrar sus pertenencias.
“Las intenciones del taxista, no eran matarla, no dice por qué se tiró, si le quiso robar, ella entrega todo, pero no iba a tirarse del carro, entonces para mí, él la intentó violar”, dijo Joseline Romero Meza, sobrina de la víctima.
La progenitora de Nelly no solo vive con el dolor de haber perdido a su hija, también se muestra afectada por la ausencia de su nieta (hija de la víctima), cuyo padre decidió llevarse.
Ahora, para su progenitora, el dolor de no tenerla es un dolor cada vez más difícil.