El Diario Nica

El 2023 es un año clave para México

La lucha al interior del oficialismo para definir al aspirante se vuelve cada vez más intensa.

Este año será clave para la izquierda mexicana su candidato presidencial terminará definiendo el rumbo de la denominada ‘Cuarta Transformación’, el proyecto político del actual presidente Andrés Manuel López Obrador.

Hasta el momento son cinco los aspirantes, cuatro de ellos militantes del partido Movimiento Regeneración Nacional (Morena) y el quinto, un diputado federal por el Partido del Trabajo (PT).

Si bien todos ellos se adscriben en la izquierda, son perfiles muy distintos entre sí. Cada uno, con sus respectivas trayectorias, enfrenta dificultades y retos que habrá de sortear con vistas a convertirse en el candidato que buscará dar continuidad al proceso de cambio iniciado en 2018.

Igual que varios sus compañeros de la ‘Cuarta Transformación’, y a pesar de sus responsabilidades a cuestas como jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum ha estado aprovechando los fines de semana para visitar diversas entidades de la República, lugares donde es poco conocida.

Además, en los últimos meses se han observado pintas en bardas en diversos estados del país, así como la contratación de anuncios espectaculares con la leyenda #EsClaudia, acompañada de la silueta de la jefa de Gobierno.

Desde la oposición se le ha acusado de actos anticipados de campaña. Sin embargo, Sheinbaum rechaza que sean ella y su equipo los responsables de la promoción de su imagen.

De acuerdo con su versión, se trata de muestras de apoyo «espontáneas», pagadas con el dinero de sus simpatizantes.

Desde la oposición e incluso también varios integrantes del oficialismo aseguran que la propaganda a favor de Sheinbaum se trata de una maniobra dirigida a resolver una de sus principales debilidades: su bajo nivel de popularidad en escala nacional.

Para resarcir este ‘talón de Aquiles’, la jefa de Gobierno además de realizar sus giras los fines de semana, ha buscado mantenerse muy cerca del presidente López Obrador, cuya aprobación permanece imbatible a más de cuatro años de Gobierno.

El presidente ha negado tener favoritismos. Sin embargo, la cercanía con la jefa de Gobierno de la capital del país es evidente. Una vez a la semana Sheinbaum acude al Palacio Nacional a una reunión en materia de seguridad donde participan López Obrador y su gabinete.