El incidente de Raleigh fue el último en una semana de violencia en todo el país.
Policía de Raleigh, en Carolina del Norte, informaron que un sospechoso de 15 años quedó bajo custodia, después de un tiroteo que dejó cinco muertos.
Estella Patterson, jefa de policía, mencionó que la policía aún tiene que determinar el motivo del tiroteo, que convirtió el jueves a un tranquilo vecindario de clase media en una extensa escena del crimen.
Patterson no identificó al sospechoso por su nombre ni dijo cómo resultó herido.
Los tiroteos comenzaron a las 17.00 hora local (2100 GMT) en las calles del barrio Hedingham de Raleigh, donde se les dijo a los residentes que permanecieran en sus casas durante horas mientras la policía realizaba una persecución masiva.
El sospechoso fue encontrado más tarde cerca de Neuse River Greenway, en una área para caminar y andar en bicicleta donde disparó a más personas, dijo Patterson. Después de un enfrentamiento, la policía lo detuvo en una residencia cerca del sendero.
Las autoridades dijeron que los tiroteos inquietaron a los residentes de la capital del estado, una ciudad de unos 500.000 habitantes conocida como un centro de investigación de alta tecnología.
Tres mujeres, de 52, 49, 35 años y un niño de 16 años estaban entre los muertos en el tiroteo, expresó Patterson.
Un oficial de 29 años que murió durante el asalto fue identificado como Gabriel Torres, quien se dirigía a su trabajo cuando ocurrió el incidente.
Patterson, indicó que dos personas resultaron heridas: un oficial de policía que fue tratado y dado de alta, una mujer de 59 años que estaba hospitalizada en estado grave.
Roy Cooper, gobernador, añadió “Esta noche, el terror ha llegado a nuestra puerta. La pesadilla de toda comunidad ha llegado a Raleigh. Lo que se ha cometido es un acto de violencia sin sentido, horrible y frustrante”.
Mary-Ann Baldwi, la alcaldesa de Raleigh, dijo “Debemos poner fin a esta absurda violencia en Estados Unidos y debemos atender la violencia con armas de fuego. Tenemos mucho por hacer, y esta noche tenemos mucho que lamentar”.
El incidente de Raleigh fue el último en una semana de violencia en todo el país.
Asimismo, cinco personas fallecieron el domingo en un tiroteo en una casa en Inman, Carolina del Sur. El miércoles por la noche, dos policías murieron por disparos en Connecticut tras caer en una aparente emboscada al responder a una llamada por un posible caso de violencia doméstica. Además, esta semana hubo balaceras contra agentes de policía en Greenville, Mississippi; Decatur, Illinois; Filadelfia, Las Vegas y el centro de Florida. Dos de ellos, uno en Greenville y otro en Las Vegas murieron.
El del jueves fue el 25° tiroteo masivo del año en Estados Unidos con víctimas por disparos, de acuerdo con la base de datos conjunta de The Associated Press/USA TODAY/Universidad de Northeastern.
Una balacera masiva es aquella en la que hay cuatro o más fallecidos, sin contar al autor.