La opinión pública dirige su atención hacia la compañía tras el bloqueo temporal de la cuenta del rapero estadounidense Kanye West.
La red social está reevaluando sus políticas en torno a las prohibiciones permanentes de usuarios en medio de los prolongados intentos de Elon Musk de comprar la plataforma de redes sociales por 44.000 millones de dólares, según apunta el diario económico Financial Times.
Según varias fuentes anónimas, Twitter está estudiando la existencia de otras herramientas de moderación de contenidos que puedan sustituir al bloqueo, el castigo más duro que tiene por infringir sus reglas.
Twitter suspende permanentemente a los usuarios que violan las normas «de forma especialmente atroz» o que las «infringen repetidamente incluso después de recibir nuestras notificaciones«.
A principios de 2022, el gigante tecnológico comenzó a revisar si podría reemplazar las prohibiciones permanentes con otras herramientas de moderación de contenido, explican al FT varias personas con conocimiento del asunto.
Twitter suspendió permanentemente a Trump de la plataforma en enero de 2021 «debido al riesgo de una mayor incitación a la violencia» tras el intento de insurrección en el Capitolio de EEUU.
De todas formas, si Twitter realiza algún cambio en sus políticas, es poco probable que se le permita al expresidente Donald Trump recuperar su cuenta, revelan 2 fuentes.
La red social ha analizado situaciones en el pasado en las que cree que la compañía fue demasiado dura al bloquear a las personas de sus cuentas por delitos menores, como algunos usuarios que compartieron información engañosa en la plataforma, por ejemplo.
Elon Musk, quien originalmente hizo una oferta para comprar Twitter en abril, dijo durante una entrevista con el FT en mayo que «revertiría el bloqueo permanente» si fuera dueño de la red social.
El multimillonario también describió la decisión de Twitter de prohibir a Trump como «una decisión moralmente mala» y «tonta«, y dijo que restauraría la cuenta del expresidente.
El bloqueo más reciente fue, el del rapero estadounidense Kanye West, después de que escribiera comentarios antisemitas en un tuit que Twitter eliminó por violar sus pautas.