Este año el lema es Lenguas de Señas, el cual se desea resaltar el valor que tiene en la diversidad, identidad lingüística y cultural de las comunidades.
El 23 de septiembre se celebra el Día Internacional de las lenguas de señas, proclamado por la ONU en noviembre del 2017, para promover y sensibilizar sobre la importancia de esta forma de comunicación, que restituye los derechos humanos de las personas sordas.
Son más de 360 millones de personas que no tienen la capacidad auditiva en el mundo, según la página oficial del Centro de Información de la ONU (CINU), lo que representa un 5% de la población mundial, de ese total 32 millones son niños.
Sin embargo, solo el 20% de las personas sordas utiliza la lengua de señas como idioma materno, debido a que algunos emplean implantes cocleares y se comunican en la lengua hablada de su país. Otros no tienen la oportunidad de aprender el lenguaje de señas ni utilizar este tipo de implantes, por lo que la comunicación se hace más difícil.
Es por ello que las Naciones Unidas, convoca a proteger y preservar la amplia diversidad de las lenguas de señas, facilitar el acceso a las mismas y establecer su aprendizaje obligatorio como pasos necesarios para garantizar los derechos humanos para las personas sordas.
Hoy en día existen más de 300 lenguas de señas en todo el mundo. Cada país tiene la suya e, incluso, a veces en una misma nación se puede encontrar más de una.
De acuerdo a especialistas, las variantes son pequeñas, sin embargo, se respetan como sistemas distintos y nombres diferentes, ya que se carga o reproduce la identidad de las comunidades.
En una conversación en lengua de señas, los interlocutores no miran las manos, sino la cara, debido a que la expresión del rostro expresa situaciones gramaticales. Una pregunta y una afirmación a esa misma interrogante, por ejemplo, posee las mismas señas, por lo que la expresión facial es clave para saber si se afirma o se interroga.
El Día Internacional del lenguaje de señas, es una conmemoración reciente, se celebró por primera vez el 23 de septiembre de 2018, en el marco de la semana Internacional de los sordos, que se lleva a cabo del 24 al 30 de septiembre.
La propuesta, para la celebración de este Día, fue realizada por la Federación Mundial de sordos (DMA), una federación de 135 asociaciones nacionales de sordos, que representan aproximadamente 70 millones de personas sordas en todo el mundo. La resolución fue patrocinada por la misión permanente de antigua y barbuda ante las Naciones Unidas, copatrocinada por 97 Estados miembros de las Naciones Unidas y aprobada por consenso el 19 de diciembre de 2017.
Se eligió el 23 de septiembre, porque fue la fecha en que se estableció el DMA en 1951. Este día marca el nacimiento de una organización, que tiene como uno de sus principales objetivos, la preservación de los lenguajes de signos y la cultura sorda como prerrequisitos para la realización de los derechos humanos de las personas sordas.
El acceso temprano a la lengua de señas y a los servicios en este lenguaje, incluida una educación de calidad en esa lengua, es vital para el crecimiento y el desarrollo de las personas sordas, y decisivo para el logro de los objetivos de desarrollo sostenible. “Con lenguaje de señas, ¡todo el mundo está incluido!”.