Niños, jóvenes y adultos protagonizaron la 43 edición del repliegue hacia la hacienda El Vapor, caminata que se realiza anualmente en memoria de los héroes y mártires que ofrendaron su vida para la liberación de Nicaragua.
Año con año miles de nicaragüenses se dan cita en el populoso barrio San Judas de Managua, capital de Nicaragua, jóvenes de todas las generaciones, combatientes históricos, madres de héroes y mártires, brigadas de motorizados y familias enteras, se reúnen para iniciar la caminata de más de 10 kilómetros hacia la hacienda El Vapor.
El 16 de junio de 1979 fue la primera edición del Repliegue Al Vapor, semanas antes del histórico 19 de julio de 1979, cuando Nicaragua entera vivió el Triunfo de la Revolución Popular Sandinista.
El Repliegue al Vapor consistió en una recomposición de las fuerzas sandinista del sector de San Judas y barrios aledaños, durante la insurrección contra la dictadura somocista que venía intensificando sus ataques contra el pueblo nicaragüense.
En esta acción guerrillera, la población del heroico barrio de San Judas destacó como bastión guerrillero del Frente Sandinista de Liberación Nacional, miles de jóvenes se insertaron a la lucha con una sola convicción que era liberar al pueblo de las garras de la tiranía somocista.
Los guerrilleros sandinistas y la población de Managua, emprendieron la retirada táctica hacia la Hacienda El Vapor, en El Crucero, desde donde reconcentrarían fuerzas para dar el golpe final a la dictadura de Anastasio Somoza.
El combatiente histórico Héctor Luis Obregón, conocido con el seudónimo de “El Motor” y que participó en la primera edición del Repliegue a El Vapor, recordó que en la época de la dictadura somocista ser joven era prohibido, y miles ofrendaron su vida para que se diera el triunfo de la Revolución.
De igual manera mencionó que un día antes que se celebrara el Repliegue a la Hacienda El Vapor, cayó en combate el compañero René Cisneros.
Obregón dijo que la guardia genocida de Somoza había montado la «Operación Limpieza», y como los revolucionarios se habían quedado sin municiones, se decidió hacer el Repliegue a la Hacienda El Vapor, para evitar una mayor masacre.
“Nuestros hijos dieron su vida para que hoy vivamos en Paz, en Amor y con programas de restitución de derechos para los más necesitados, y esta es una manera más de celebrarlos, porque gracias a ellos Nicaragua es Libre y va por rutas de progreso”, indicó una militante que perdió a su hijo en 1979 cuando la guardia nacional bombardeo una zona de Managua mientras perseguía a decenas de jóvenes.
Todo el recorrido se desarrolló en un entorno de paz y alegría lo que dio lugar a diferentes manifestaciones culturales del folklore nicaragüense, carrozas, bailes, gigantonas y música testimonial, ambiente que es característico de estas conmemoraciones del pueblo sandinista.
“Esta es una gran fiesta para todas las familias nicaragüenses, conmemoramos a nuestros héroes y mártires con solemnidad, pero también celebramos todo lo que hemos logrado después del triunfo de la Revolución, bajo gobiernos sandinistas”, añadió Martha Pérez Rojas, joven que año con año camina hacia El Vapor.